Todo lo que han vivido Mónica Sarai Arango y Estefanía Álvarez desde marzo, cuando lograron la clasificación a Juegos Olímpicos, ha sido mágico.
Quedar en la historia como las primeras nadadoras sincronizadas en alcanzar el cupo a Olímpicos fue solo el primer pasao de una historia que cada día tiene una nueva página de sorpresas y alegrías.
Así de claro lo tienen las dos nadadoras y sus entrenadoras, quienes tuvieron que volverse más exigentes para que las cosas extras que llegaron con la clasificación no alteraran los días de entrenamiento.
Horarios para entrevistas, fotos, videos, comerciales y compromisos oficiales con el COC se mezclaron con las horas de piscina, gimnasio y trabajo psicológico para las deportistas que hoy partirán la historia...
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