Pasillos, bambucos, boleros, tríos y duetos sonaron en el parque principal de Valparaíso el 28 y 29 de junio, durante el primer Festival de Música Andina Tartarín Moreira. Visitantes de distintos municipios del Suroeste llegaron a escuchar música en vivo bajo la gran carpa instalada frente a la alcaldía. Los hoteles se ocuparon por completo, las fincas en alquiler no tuvieron cupo y los restaurantes trabajaron sin pausa. El festival demostró que en Valparaíso había un deseo latente de reencontrarse con su tradición musical y de fortalecer su movimiento cultural.
Esa dinámica fue posible gracias a la Corporación Tartarín Moreira, una idea que surgió en febrero, cuando un grupo de valparaiseños se reunió para rendir homenaje a Libardo Parrado Toro, conocido como Tartarín Moreira, músico y poeta nacido en 1895 en el municipio. La convocatoria superó cualquier expectativa: de 25 personas en la primera reunión pasaron a más de 130 interesadas en ser socias fundadoras. En tiempo récord formalizaron la Corporación y se propusieron organizar un festival musical que recuperara el legado de Tartarín y atrajera un turismo respetuoso a la cultura local.
Jaime Vargas, vicepresidente de la corporación, recuerda ese arranque como un impulso colectivo que unió a vecinos, amigos y a varios empresarios de la región. El apoyo de la Cámara de Comercio de Medellín para Antioquia fue decisivo para avanzar rápido en la formalización y en la búsqueda de aliados. También se sumaron la alcaldía, organizaciones del Suroeste y empresas locales que creyeron en la idea.
El resultado fue un evento que reunió a artistas reconocidos como Dueto Nocturnal, Dueto Serenata, grupos de música andina y voces locales, junto a talentos jóvenes que encontraron un escenario para mostrarse. Durante dos días, el pueblo escuchó música colombiana, una oportunidad para que las nuevas generaciones se acercaran a géneros que han marcado la identidad del municipio.
La creación de la Corporación no solo responde a un interés cultural. Para quienes la integran, hace parte de un esfuerzo por fortalecer el turismo, dinamizar el comercio y visibilizar el trabajo de cafeteros, artesanos, emprendedores y gestores que han impulsado actividades culturales, deportivas y artísticas durante años.
El festival fue apenas el primer paso. La Corporación ya trabaja en nuevas actividades y en estrategias para atraer visitantes los fines de semana, apoyar a los negocios locales y seguir consolidando un proceso cultural que nació del afecto profundo que los habitantes tienen por su pueblo. Jaime lo resume con sencillez: un grupo de personas que quiere que Valparaíso sea reconocido por su música, su tradición y la calidad de su gente.
Regístrate al newsletter