El crítico francés André Bayin comenta que muchos actores confiesan sentirse incómodos cuando ruedan escenas de sexo. Otros las ven necesarias para entrar en el mundo del cine -un peaje que hay que pagar- pero renuncian a ellas cuando tienen un cierto 'caché'. Es el caso, por ejemplo, de Brad Pitt , quien manifestó que no volvería a actuar con desnudos y explica: "No quiero sentirme avergonzado cuando mis hijos sean grandes y vean mis películas".
A veces el testimonio de dignidad y principios cuesta: la cadena ABC de Estados Unidos despidió al actor Neal Donough , popular en películas y series de televisión como "Mujeres desesperadas" porque se negó a protagonizar una escena de sexo explícito en una película. La razón que da el actor es que es católico practicante, casado y con tres niños pequeños: prefirió actuar en conciencia por respeto a su familia a pesar de que los honorarios por su actuación eran un millón de dólares.
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