Nuevamente estoy pidiendo comprensión, amor y respeto por el adulto mayor. Como es conocido por todos el gobierno está en la campaña del cambio de cédulas para toda persona mayor de 18 años. Hace seis meses fui a realizar el proceso de mi cambio de cédula y como soy enfermera y trabajo en un centro gerontológico y de cuidados paliativos, me atreví a pedirle el favor al Registrador que me contactara con alguien allí para que se desplazaran al hogar y realizaran esta labor con todos los adultos mayores que allí viven.
El Registrador me dijo que podía consultar en la Registraduría cercana a nuestro centro, lo hice, pero me dijeron que cada uno debía desplazarse para hacer el cambio; y también me dijo; para mi asombro, que para qué la íbamos a sacar si ellos estaban tan viejos y ya iban a morirse.
Cuál sería mi sorpresa, esperaba que me indicaran un número para que estos adultos no se tengan que desplazar, esperaba que les facilitaran las cosas por su condición de salud, esperaba que tuvieran consideración por su edad, pero NO, la respuesta fue la más facilista del mundo, como se van a morir para qué cambiarla.
Así que me cuestiono nuevamente: Si el adulto mayor no tiene derecho a un poco de comprensión y consideración; por qué cada día se cobra su pensión, por qué paga para ser atendido en salud, por qué tiene que presentarse casi a las puertas de la muerte para demostrar su supervivencia; porque AÚN ESTÁ VIVO.
