El Gobierno brasileño envió este domingo a Surinam un avión militar con dos diplomáticos que se unirán al embajador y autoridades de ese país con el propósito de constatar la situación y atender a los brasileños que fueron atacados por la población civil en la ciudad de Albina.
La misión de ocho personas, integrada por diplomáticos brasileños y representantes del Gobierno y la Policía surinamesa, verificará si existen víctimas mortales, como reportan testigos, y dará atención a los extranjeros refugiados en hospitales y hoteles resguardados por las autoridades locales, según reportó la prensa digital brasileña.
En una entrevista con el portal de noticias G1, el embajador brasileño en Surinam, José Luiz Machado e Costa, informó que "oficialmente" no se tiene conocimiento sobre la muerte de brasileños.
"Iremos hasta allá para evaluar la situación, para ver si todavía hay brasileños en la región e investigar más datos, pues hasta ahora tenemos sólo relatos y ninguna información oficial de muertos", comentó Machado e Costa.
El misionero brasileño José Vergilio, quien el sábado visitó el lugar de los acontecimientos, declaró al canal televisivo brasileño Globonews que por lo menos siete personas murieron en los ataques de la población civil local.
"Los números son contradictorios. El número no fue confirmado, pero ya pasa de siete muertos. La señora que perdió el bebé fue cortada y el bebé arrancado del estómago murió en la tarde del sábado. Encontramos también un cuerpo en el agua y eso nos impactó a todos", relató Vergilio.
