Yady Isaza no le pide plata a la Alcaldía, sino un techo en el que pueda vivir con sus dos pequeños hijos. Hace treinta años llegó al barrio para habitar una de las 780 casas que el entonces congresista Pablo Escobar Gaviria les regaló a familias necesitadas de la ciudad mediante su obra Medellín sin tugurios.
Hoy el predio es requerido para la construcción del jardín infantil Buen Comienzo, que está proyectada para iniciar en enero o febrero de 2015.
El problema para Yady es que al regalo que en su momento dio Escobar le faltó algo: el título de propiedad. Y, según explica Diego Restrepo, Director del instituto Social de Vivienda y Hábitat, Isvimed, como entre 2008 y 2011 la Corporación Medellín sin tugurios le donó los terrenos al Municipio, éste es en realidad el propietario del bien que posee esta ciudadana.
Ella cuenta que le ofrecieron 12 millones de pesos, que considera insuficientes para el reasentamiento de su familia en otro sector.
"En 2012 entregamos a Medellín sin tugurios todos los títulos de predios que eran posibles de entregar. ¿Cuáles no? Los que estaban afectados por vías, en zonas de alto riesgo y los que se necesitaban para equipamientos como Buen Comienzo. A ellos no les podemos titular", explicó el Director del Isvimed.
Actualmente, informa el arquitecto Cristian Pineda, Coordinador de Infraestructura de Buen Comienzo, la obra están en proceso de negociación de predios con 33 residentes, a quienes se les han hecho llegar las ofertas de compra.
De no conseguir un acuerdo, la Administración podría acudir a la vía de la expropiación administrativa. Compraría la propiedad por el valor que tase un avaluador profesional.
La obra tiene un costo estimado de $6.500 millones, y los diseños y estudios iniciarán en junio próximo, para comenzar ejecución en un año.
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