El goleador John Andrés Córdoba se notaba feliz. Sus 12 anotaciones no solo contribuyeron para el título de Antioquia, sino para llenar de orgullo a su papá, Manuel Ascisclo, otrora "rompe redes" que ve cómo su retoño le sigue los pasos en el fútbol.
El morocho alto y de sonrisa amplia, sus 23 compañeros de hazaña y el cuerpo técnico que comanda Óscar Pérez, recibieron ayer honores por parte de la Liga en el hotel Tryp Medellín. Todos se pusieron la camiseta que los distingue como pentacampeones nacionales.
Luego de ganar la corona en Pasto, con muchas dificultades como lo recordó el entrenador Pérez, estos jóvenes menores de 18 años, algunos repitentes de la temporada pasada, sintieron una vez más el significado de representar a una región que es potencia deportiva en el país.
Se los recordaron los dirigentes Mauricio Parodi y Jesús Ramírez, así como el representante de Colanta, Federico Pérez, al brindar por el logro que a todos les generará grandes recompensas, como en el pasado sucedió con los ídolos de hoy.
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