A las 7:30 a.m. comenzó una reunión de alto nivel en la que el Gobierno aspira a definir las variables que serán tenidas en cuenta para la negociación del salario mínimo. Participarán los ministros de Hacienda y Trabajo y el director de Planeación Nacional, entre otros.
En la reunión de empresarios del pasado lunes, centrales obreras y Gobierno nacional, se dio a conocer que la tasa de crecimiento es de 4,8 por ciento, el IPC de 3,1 por ciento, el IPC para el 2013 de 3,0 por ciento y el índice de productividad laboral estará entre 0,73 por ciento y 0,92 por ciento.
Frente a la productividad, se presentó un debate porque para las centrales obreras esa cifra “debe ser mayor teniendo en cuenta que el factor trabajo podría impulsarla hasta el 2. No es la que se está manejando en este momento y no hay acuerdo. Así que ese será otro de los temas que se aborden en la mesa de negociación”, explicó el presidente de la Central General de Trabajadores, CGT, Julio Roberto Gómez.
El líder gremial indicó que insistirían en que el incremento salarial debe tener en cuenta el crecimiento del IPC y la productividad, además de “unos puntos de recuperación, teniendo en cuenta el desarrollo positivo de la economía durante el 2012”.
Por su parte, Andrés Mauricio Ramírez, secretario general de la Comisión de Concertación de Políticas Salariales y Laborales, afirmó que Planeación Nacional estimó tres modelos econométricos “que permitieron capturar el mejor dato estadístico: el de 0.73 por ciento”. Además, resaltó que hubo un acuerdo metodológico tanto de Gobierno, centrales obreras y empresarios en la metodología con la que se obtuvieron los cálculos.
El presidente de la CGT dijo que en cuento a la propuesta del salario mínimo “no hemos hablado de un porcentaje de lo que sería incrementado el salario mínimo legal. Vamos a continuar en deliberaciones y oportunamente las centrales obreras daremos a conocer la cifra que vamos a plantear en la mesa de negociación, pero hasta el momento nadie ha planteado”.
Gómez explicó que no dirán públicamente cuál es la propuesta hasta que no lleguen a un acuerdo las centrales obreras. “Estamos tratando de construir un consenso para una cifra que sea favorable, es decir, ni tanto que queme al santo ni tan poco que no lo alumbre”, concluyó.