La escultura, La Resurrección , un referente que da la bienvenida al parque cementerio Campos de Paz, muestra su nueva faz, hoy, luego de un poco más de cuatro meses de restauración, a cargo del maestro Armando Arango.
El bronce data de hace 40 años y es obra de Jorge Marín Vieco. Tiene 14 metros de alto y pesa 3.5 toneladas. Es una alegoría al hombre en busca de paz.
De acuerdo con funcionarios de la Funeraria Campos de Paz, se invirtieron 100 millones de pesos en restaurar las bases, así como la estructura exterior e interna, que se habían deteriorado por el paso del tiempo.
La obra continuará ubicada en el mismo lugar, a la entrada del Parque Cementerio, y se planea entregarla a la ciudad para su disfrute, pues es una de las pocas que existen de esta envergadura.
Hoy, a las 11:00 a.m., el arzobispo de Medellín, Ricardo Tobón, descubre la nueva cara de La Resurrección, en una ceremonia privada.
Una espera que habrá valido la pena.
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