No es nueva y no por eso deja de ser deplorable la actitud que mantienen ciertas ONG de derechos humanos en los Estados Unidos y Europa contra Colombia. El último caso se presentó con Wola que, en un comunicado ligero e irresponsable, relacionó a la Embajada de Colombia en Washington con las presuntas amenazas que han recibido varios líderes sociales, por parte de las Águilas Negras.
El rechazo categórico de la embajadora Carolina Barco a esas insinuaciones obligó a que la ONG retirara del comunicado el párrafo donde se hacían las acusaciones, pero eso no mitiga el daño a la imagen del país, porque como lo dijo la señora Barco, "ya está hecho". Grupos de izquierda que se mueven por el mundo en busca de recursos, a costa de desprestigiar gobiernos, son los que realmente hacen propaganda negra. Muchas veces logran hacerle daño a Colombia, pero cada vez más quedan en evidencia sus mezquinas estrategias.
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