Arreció la polémica entre E.U. y Venezuela, tras el anuncio del presidente Nicolás Maduro de exigir el requisito del visado a los estadounidenses que quieran visitar el país vecino. Esta decisión la argumentó el sábado, en alocución televisada, diciendo que capturaron “algunos estadounidenses en actividades encubiertas, de espionaje, tratando de captar gente en pueblos de la costa venezolana”.
Por esta supuesta amenaza, Maduro anunció varias medidas: en primer lugar, todo visitante estadounidense requerirá de una visa para poder entrar a Venezuela. Según dijo el mandatario, todo el que “quiera venir de turismo, actividades económicas y a jugar béisbol será bienvenido”, pero con dicho documento, en un trámite que tendrá el “mismo precio que les cobran aquí a los venezolanos en la embajada de los Estados Unidos”.
En segundo lugar, el gobierno chavista reducirá la cantidad de funcionarios que podrá tener la Embajada de E.U. “Le he ordenado a la Cancillería que proceda de inmediato, de acuerdo a la Convención de Viena, a revisar y limitar el número de funcionarios que hay en la embajada de Venezuela. Ellos tienen 100 empleados, nosotros tenemos 17”, agregó Maduro.
Por último, el mandatario venezolano no desaprovechó la ocasión para llamar a distintos políticos estadounidenses “terroristas”, mientras anunció que prevé crear una lista de personajes de dicho país que no podrán entrar bajo ningún modo a Venezuela. “Una lista antiterrorista que va a ser encabezada por George W. Bush, Dick Cheney, George Tenet (exdirector de la CIA) y por los congresistas Bob Menéndez, Marco Rubio, la loba Ileana Ros-Lehtinen y Mario Díaz-Balart”, afirmó.
Consultado por EL COLOMBIANO, Jesús Castillo, politólogo y docente de la Universidad del Zulia no dudó en ver la decisión de Maduro como una “maniobra para fortalecerse en cuanto a política interna. Esto para multiplicar el apoyo y unidad dentro de las filas chavistas, en momentos difíciles. No obstante, esto podría afectar a Venezuela dado que con visado huirá la poca inversión que permanecía en el país, rumbo a otros de A.L.”.
