Es pequeño, apenas para sus cuatro años de edad. Está sentado en las escaleras del parque de Envigado, entre las piernas de su tío, que le pregunta, "Juan, ¿cuál es la canción que te gusta?", y él, ni lo duda: "Esa morena". Luego voltea, y abriendo unos ojos grandes, dice: "El Monchi, ¿ahorita llega?"
Juan Manuel Urán y su tío, Luis Fernando Urán, eran dos de los tantos que esperaban al Monchi Maestre, para que les cantara esa canción a la que la novela le debe el nombre, Oye Bonita.
Y mientras la lluvia hacía compañía, el público tomó impulso con las canciones que Alejandro Palacio, mejor conocido como El Duro Isaza, les interpretó, antes de que se subiera al escenario Karol Márquez o "El Monchis", como lo llamó Astrid Johanna Oquendo, quien también esperaba al artista.
Alejandro, que con su personaje no comparte sino "la picardía de la mirada", dejó en el escenario el cien por ciento de su repertorio. Él, aunque le gusta eso de la actuación, se queda con la música, y se le nota cuando se emociona con una canción.
De pronto, un estruendo producido por los gritos, y el Monchi que llega al escenario, que se mueve de un lado para otro, que baila un poquito. Y con la lluvia, le dejó a Envigado, todos esos vallenatos que le dedica a la Bonita.
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