Pocos lo saben, pero la casa está llena de amenazas reales. Aunque muchas personas pasan la mayor parte del día en ella, desconocen qué contiene la vivienda.
Allí también existe el material particulado peligroso para la salud, compuestos orgánicos volátiles (algunos son cancerígenos) que provienen de muebles, pinturas, alfombras y equipo de oficina.
En ese ambiente, las plantas vienen en nuestra ayuda. Absorben toxinas y pueden mejorar la calidad del aire dentro de la casa.
En un estudio publicado en Trends in Plant Science, Frederico Brilli, fisiólogo de plantas en el
en el Instituto pata las Protección Sostenible de Plantas en Italia, y colegas, concluyeron que conocer mejor la fisiología de ellas, junto a tecnologías de limpieza del aire, pueden mejorar el ambiente interno en las viviendas.
Las plantas mejoran la calidad del aire mediante distintos mecanismos: absorben dióxido de carbono y liberan oxígeno a través de la fotosíntesis, aumentan la humedad transpirando vapor de agua a través de los poros microscópicos en las hojas y pasivamente pueden absorber contaminantes en las superficies externas de las hojas y en el sistema radicular.
Pero pese a esos servicios, la elección se basa en su apariencia y capacidad de vivir en interiores y no en su capacidad para purificar el aire.
“Para la mayoría de nosotros, las plantas solo son un elemento decorativo, algo estético, pero también son algo más”, dijo Brilli.
No obstante esas capacidades, poco se han cuantificado los efectos de distintas especies en la calidad del aire en las casas, salvo un tímido estudio de la Nasa hace décadas.
Por eso se requieren estudios que identifiquen las características de las plantas que se desempeñan mejor en ambientes interiores incluyendo su morfología (por ejemplo forma y tamaño de la hoja), su anatomía y fisiología (asimilación de CO2).
Esas investigaciones ayudarían a optimizar el uso de las plantas dentro de las viviendas en término de cuántas por metro cuadrado se requieren para reducir la polución del aire.
Con ese fin se debería conocer el papel de los microbios que viven en ellas en la remoción de contaminantes y también en el desarrollo de problemas de salud como alergias.