En lo que va corrido de este año el peso colombiano ha perdido 15,27 % de su valor frente al dólar, lo que lo ubica en el podio mundial de las monedas más devaluadas.
De acuerdo con datos suministrados por Investing, página web dedicada al mercado bursátil, Colombia ocupa el segundo lugar en la región, detrás de Venezuela, cuya devaluación es de 156,03 %. A nuestro país le sigue Argentina con 13,11 %, que viene de un largo periodo de devaluación.
En el resto del mundo, teniendo en cuenta las monedas emergentes, la lira turca es la única que está más devaluada que el peso colombiano, por cinco centésimas (15,32 %).
Felipe Campos, director de investigaciones de Alianza Valores, explicó que el peso colombiano siempre se compara con las monedas de México, Chile, Perú y Brasil que son con las que usualmente hay correlación, aunque hablar de toda la región o del mundo tiene un impacto simbólico que en el caso de la devaluación significa crisis.
Aunque para Wilson Tovar, jefe de investigaciones económicas de Acciones y Valores, “pensar en la devaluación en periodos específicos y en comparación con otras monedas es un poco injusto”.
Según su análisis, este año han concurrido varias situaciones que han llevado a una alta cotización del dólar: “La pandemia nos cogió flacos fiscalmente y hubo un gran costo al atender la pandemia, lo que ha dañado los indicadores con los cuales nos miden las calificadoras, al punto de perder el grado de inversión; se ha presentado un malestar social que no se ha contenido aún y que llevó a incertidumbre tributaria; y hay una baja recuperación de las exportaciones de nuestro país”.
Por su parte, Juan David Ballén, líder de investigaciones económicas de Casa de Bolsa, hay factores externos que pesan mucho en el fortalecimiento del dólar. “Primero, Estados Unidos se ha ido recuperando a un muy buen ritmo, lo que hace que el dólar se recupere mucho mejor que otras divisas; segundo, por ese mismo motivo la reserva federal está empezando a disminuir los estímulos económicos y es posible que terminen incrementando tasas de interés antes de lo esperado (en 2022); por último tenemos toda la historia alrededor del petróleo: la variante delta puede afectar la demanda por crudo y la Opep incrementó en 400.000 barriles la producción para el mes de agosto, lo que explica la debilidad reciente del precio del crudo, que dada su relación inversa con el dólar lo ha posicionado hacia arriba”.