Tal y como lo pronosticó el pasado 24 de abril, Ecopetrol reportó una caída del 53,9 % en su utilidad neta consolidada (1,41 billones de pesos) por cuenta de la parálisis mundial del sector petrolero. Mientras que el beneficio atribuibles a los accionistas (entre los que el Estado es socio mayoritario con el 88,49 %) bajó 95,2 % al pasar de 2,7 billones de pesos, a 133.000 millones de pesos durante el primer trimestre de 2020.
Si bien no es el peor resultado de su historia empresarial, pues tras la crisis petrolera en 2015 se registraron pérdidas de hasta 4 billones de pesos, el panorama es bien complicado “porque los precios no parecen estimularse a 40 dólares”, dijo José Roberto Acosta, profesor de economía en la Universidad Nacional.
Los ingresos de la firma pasaron de 15,9 billones de pesos a 15,07 billones de pesos, lo que le da para tener un caída del 5,5 % frente a 2019. Una de las explicaciones es el fenómeno que se desprende del inicio de la parálisis de las industrias que demandan el material por el covid y la tensión al interior de la Organización de Países Exportadores de Petróleo (Opep). El barril de referencia Brent estuvo muy cerca de los 51 dólares, en el primer trimestre de 2020, cuando hace un año llegaba a los 64 dólares.
Las ventas en el exterior impactaron, con una caída del 11,6 %, al pasar de 8,1 billones a 7,1 billones de pesos en los tres primeros meses de 2020. Mientras que las operaciones en Colombia experimentaron un leve crecimiento, del 0,9 %, y cerraron en 7,89 billones.
Situación que al final hizo que el ebitda (ingresos antes de intereses de deuda, impuestos, depreciaciones y amortización de las inversiones realizadas) se desplomara 28,5 %, pues restó poco más de 2,1 billones de pesos frente a 2019: para enero-marzo de 2020 cerró en 5,2 billones.
Felipe Bayón, presidente de la compañía, hizo un llamado a la calma y dijo que la empresa se prepara para ponerle el pecho a la crisis: “Hemos decidido avanzar en intervenciones adicionales, con el objetivo de asegurar una operación sostenible y un flujo de caja positivo en un entorno de precios de entre 30 y 40 dólares por barril durante 2020”.