Aunque a finales del año pasado Fabricato inició el traslado de la operación de su filial Riotex, ubicada en Rionegro, a la planta de Bello, en el norte del área metropolitana, solo ayer la empresa obtuvo la autorización de los accionistas para efectuar un proceso de fusión y absorber a esa subsidiaria.
Según Carlos Alberto de Jesús, presidente de la textilera, en julio próximo estará consolidada toda la producción en un solo complejo, mientras el inmueble desocupado en Rionegro, de 33.000 metros cuadrados, servirá para desarrollar un parque industrial.
“Hay empresas de los sectores de alimentos, textil, de la industria y del negocio electrónico que están interesados en instalarse allí. Tenemos acercamientos y avances importantes para arrendar próximamente la mitad del área”, aseguró el empresario.
Sobre la fusión con Riotex, la administración de Fabricato señaló que se trata de un tema de manejo administrativo. “Hoy tenemos que presentar los resultados de dos compañías, contratar dos revisorías fiscales, llevar contabilidades separadas y eso no tiene sentido, pero el gran ahorro estará en el frente operativo”.
Con esta movida fue necesario prescindir de los servicios de unos 300 empleados, mientras otros 150 fueron enganchados a la nómina de Fabricato. “Así, la planta de la compañía es de 2.230 trabajadores, con algunas áreas en funcionamiento de tiempo completo”, añadió.