Si bien, una guerra comercial solo deja perdedores, atenta contra una historia de libre comercio y pone a prueba la competitividad de los países, la Cámara de Comercio Colombo Americana (Amcham) realizó un estudio que permite evidenciar cuáles son las oportunidades para el país y Antioquia que surgen de este panorama de incertidumbre.
En el caso del departamento, María Claudia Lacouture, presidente de Amcham, sostuvo que hay oportunidades en las placas, hojas, bandas, cintas, películas y demás formas planas de PVC y en los dientes artificiales, principalmente.
¿De dónde surgen estos productos? De un análisis de los 731 bienes chinos a los que Estados Unidos puso arancel, y de los cuáles Colombia ha exportado al mundo 691 en los últimos siete años; 60 de ellos con ventas constantes en ese mismo período.
Esos 691 productos representaron 9,6% de las ventas totales al exterior de Colombia en los últimos siete años, con un destino prioritario: Estados Unidos.
Lacouture explicó que el ejercicio se repitió con las demás naciones involucradas de lo que salió “11 productos con potencial inmediato de exportar más a EE.UU. y 49 al resto de países”.
No obstante, la lista de oportunidades se engrosa con unos anuncios que ha hecho el Gobierno de Donald Trump, pero que aún no están vigentes (se estima que es 11 % de los productos que ha anunciado), aclaró Lacouture, es el caso de textiles y confecciones, productos para el hogar, electrodomésticos y materiales de construcción en los que Antioquia tiene potencialidades, según Amcham.
Luis Fernando Ramírez vicerrector de investigaciones de la Universidad de la Salle, coincide con el análisis de que hay que encontrar oportunidades en este panorama.
“Ahí es donde aparecen las virtudes de los TLC en materia arancelaria, que por lo general no permiten que hayan movimientos unilaterales en las tarifas. Los que estamos por fuera del circuito del conflicto tenemos una ventana para acceder con nuestros productos”, dijo Ramírez, esto, pese a no ser tan eficientes como los chinos (ver Paréntesis).
Ahí es muy importante reconocer, que si bien EE.UU., Canadá y China están en busca de nuevos proveedores, “las oportunidades de Colombia son limitadas, no porque no se tenga acceso a los mercados, sino porque la oferta es principalmente de materias primas”, dijo el profesor investigador de la Universidad del Rosario, Giovanni Reyes.
Y a su vez, comentó Reyes, desde el punto de vista de las importaciones, los productos de las economías vinculadas a la crisis (EE.UU., Canadá y la Unión Europea), “buscarán nuevas plazas y lo que podría suceder es que los consumidores colombianos tengan acceso a bienes más baratos”., por medio de las importaciones.
Ahí, explicó, hay que evaluar hasta qué punto se afecta la calidad, se da un desplazamiento de la producción nacional y qué capacidad adquisitiva tiene la demanda, más aún con la posibilidad de una reforma tributaria que pretende gravar al segmento medio de la población.