La Tierra tiene otra luna, y no es la primera vez. Los astrónomos calculan que el planeta ha tenido, por lo menos, unas tres o cuatro además de la colosal roca que cuelga del cielo, y ha inspirado a la poesía desde el principio de la humanidad.
Eso sí, esta ha sido prestada gracias a la mecánica celeste así que no se encariñe. Tampoco iluminará el cielo por la noche. Los astrónomos enumeran el brillo de los objetos que se ven en el firmamento para clasificarlos. A esta medida le llaman magnitud. Entre mayor sea el número menos se pueden identificar. Por ejemplo, el satélite natural de la Tierra tiene una magnitud de 20, mientras que el nuevo objeto que se ve en la foto que abre este artículo tiene una magnitud de -15.
Usando el Observatorio Géminis en Hawaii, un grupo de astrónomos Catalina Sky Survey* en Tucson en Arizona, capturó una vista más clara de este llamado Objeto Temporalmente Capturado (TCO) que han denominado 2020 CD3. La imagen de ella, la misma que acompaña a este artículo, fue obtenida el 24 de febrero de 2020 y muestra un diminuto punto de luz contra las estrellas rezagadas. El objeto fue descubierto el 14 de febrero de 2020.
Esta prestada por el Sistema Solar, cuenta Jorge Zuluaga, profesor titular del Instituto de Física de la Facultad de Ciencias Exactas y Naturales de la Universidad de Antioquia, es realmente un asteroide (aunque aún no se conoce su composición con fidelidad) que orbitará la Tierra por un tiempo indeterminado.
Trampas espaciales
Ahora, ¿por qué puede haber una luna temporal alrededor de la Tierra? Al parecer a medida que el objeto pasaba por el planeta en su camino a través del espacio, la gravedad lo acercaba hasta que lo atrapó en su órbita cercana luego de entrar con el ángulo y la velocidad adecuada.
Zuluaga cuenta que esta captura se explica entendiendo los puntos de Lagrange, también llamados puntos L. Al hacer un acercamiento lugar del Sistema Solar donde está la Tierra y la Luna, usted verá que es el satélite el que gira alrededor de la Tierra. Pero el asunto es más complejo que eso. Si el observador se aleja y se fija en el Sol, se daría cuenta de que en realidad es el sistema Tierra-Luna el que gira alrededor de nuestra estrella. Y aunque esto suene a lo mismo, no lo es.
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El astrónomo antioqueño señala que se le llama “luna a un objeto que gira alrededor del Sol pero que desde el punto de vista de la Tierra se ve siempre cerquita. Y esto no necesariamente pasa porque la Tierra ejerza más fuerza sobre la Luna que el Sol. Porque de hecho el Sol ejerce el doble de fuerza sobre la Luna del planeta, que el mismo planeta sobre ella”.
Y toda esta interacción gravitacional es importante porque tanto la Tierra como el Sol se influencian mutuamente. Esta interacción permite que existan unos lugares muy interesantes del Sistema Solar a los que Zuluaga se refiere como unas especies de trampas espaciales que le permiten al sistema capturar objetos celestes.
Si un ingeniero pone una nave espacial en el punto 1 de Lagrange, por ejemplo, la nave espacial sentirá una fuerza de atracción hacia el Sol y otra fuerza de atracción hacia la Tierra, lo que de alguna manera permitiría que esta se quede “quieta”. Al menos para el observador. Porque no se queda estática realmente sino que desde la perspectiva de un observador que se mueve con el Sol, se vería siempre en el mismo punto. Esto porque el Sol y la Tierra lo atraen de forma similar.
Los astrónomos creen que este objeto saldrá de la órbita de la Tierra en poco tiempo. Por ahora gira a su alrededor cada 47 días, también que pudo haber estado desde hace unos tres años. A pesar de que su composición no se conoce todavía, el 2020 CD3 es aproximadamente del tamaño de un carro. En broma Elon Musk dijo en su cuenta de Twitter que no es uno de los suyos.
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