Los beneficios de la actividad física son innegables, pero hay personas que por su condición les queda difícil realizarlos.
Ahora, científicos del Instituto Salk, basados en investigación previa que identificó un mecanismo genético cuando se corre, descubrieron cómo activarlo en ratones sedentarios con un compuesto químico, imitando los beneficios del ejercicio, incluyendo quema de grasa y estamina (fortaleza física).
El hallazgo, publicado en Cell Metabolism, no solo profundiza el entendimiento de la resistencia aeróbica, sino que ofrece a personas con problemas del corazón, enfermedad pulmonar o diabetes tipo 2, así como con otras limitaciones, la esperanza de lograr farmacológicamente los beneficios del ejercicio.
“Se sabe que la gente mejora su resistencia aeróbica con entrenamiento”, explicó Ronald Evans, autor, del Instituto Médico Howard Hughes. “La pregunta para nosotros era ¿cómo funciona la resistencia? Y si éramos capaces de entender la ciencia para remplazar el entrenamiento con una pastilla.
Desarrollar resistencia significa ser capaz de sostener una actividad aeróbica por periodos más largos de tiempo. Cuando la persona se pone más en forma, sus músculos cambian de quemar carbohidratos a quemar grasa. Así que los investigadores asumieron en un estudio previo que la resistencia es una función del aumento de la capacidad corporal de quemar grasa.
Encontraron un compuesto químico que activaba un gen conocido por hacer que los ratones fueran corredores de grandes distancias, pero no incidía en la resistencia a menos que se hiciera ejercicio.
En el nuevo estudio dieron dosis más altas a los ratones, que eran sedentarios, durante 8 semanas en vez de 4. Aquellos que recibían la droga corrían más tiempo.
Al analizar los genes y el resultado del compuesto, se encontró que este activaba el mecanismo genético logrando resistencia aeróbica a la vez que no ganaban peso y respondían mejor a la insulina.
“El ejercicio activa el PPARD (mecanismo genético), pero estamos demostrando que se logra lo mismo sin entrenamiento. Significa que se puede mejorar la resistencia al nivel de alguien que entrena sin esfuerzo físico”, en palabras de Weiwei Fan, científico del Salk.
Aunque el estudio se hizo con ratones, compañías farmacéuticas están interesadas en desarrollar ensayos clínicos con humanos.