viernes
7 y 9
7 y 9
¿Para qué se fusionan las marcas de carros?
Se hizo oficial la unión de Fiat- Chrysler con PSA. Esto hay detrás de las marcas que se unen.
La industria automotriz enfrenta cambios de fondo para continuar siendo rentable de cara a la tercera década del siglo XXI. La hibridación de las gamas, alternativas 100 % eléctricas, aparición de nuevos modelos y la despedida de otros ponen la tendencia mundial.
En este panorama muchas marcas, algunas ya centenarias, tratan de sobrevivir adaptándose a los requerimientos de los consumidores y de las leyes anticontaminantes. Estas condiciones obligan a nuevas inversiones para la investigación y el desarrollo y así satisfacer lo que el mundo pide. Para obtener estos recursos una de las alternativas más socorridas son las fusiones y formar grupos y alianzas que compartan y amorticen gastos, logística y desarrollos en sus productos.
Así nacen los grupos
El primer gran conglomerado de la industria automotriz fue General Motors, creado en 1908 por William Crapo Durant, quien recicló varias marcas que andaban en dificultados y luego formó otras para crecer como bloque y ser el primer constructor mundial durante el siglo XX, con Chevrolet, Buick, Cadillac, Pontiac, GMC y Oldsmobile. Ford Motor Company siguió sus pasos al añadir a Lincoln y Mercury, así como Chrysler Corporation a Dodge y Plymouth. Hubo otros conglomerados, como American Motors que ya desaparecieron.
En Europa fueron los ingleses, que tenían pluralidad de marcas, los que tuvieron que unirse para no desaparecer. El mismo caso se dio en Italia, Francia, Alemania y Suecia, los otros cuatro grandes fabricantes del viejo continente.
En Japón y Corea la historia es parecida. Compañías como Toyota, Nissan, Mitsubishi, Subaru, Hyundai y Kia no marchan solas. Pertenecen a algún grupo que les inyecta capital y los mantiene a flote compartiendo sinergias y conocimientos. En definitiva, los carros que hoy circulan no pertenecen a independientes, hacen parte de algún colectivo, aunque por cuestiones de identidad conservan autonomía en sus procesos y comercialización para no confundir a los clientes.
Los más grandes
Actualmente el conglomerado automotriz más grande y rentable del mundo es el Grupo Volkswagen. Con sede en Wolfsburg, Alemania, bajo su paraguas se acomodan marcas como la propia VW, Audi, Porsche, Bentley, Lamborghini, Bugatti, Ducati, SEAT y Skoda. Al año venden casi 11 millones de unidades en conjunto, según el ejercicio de 2018.
En segundo lugar se posiciona la Alianza Renault-Nissan-Mitsubishi, con 10,7 millones de unidades comercializadas. Esta formación, con sede en Amsterdam, Holanda, es una unión franco japonesa de más de 450.000 empleados que cumple ya 21 años de conformada. Aparte de estas referencias maneja Infiniti, Dacia, Alpine, Datsun y Lada. Esta alianza es la que más vehículos eléctricos produce en el mundo (500.000 unidades anuales). También tiene colaboraciones con empresas como Daimler de Alemania y Dongfeng de China.
Completando el podio está el Grupo Toyota. Tiene a Toyota, Lexus, Hino, Subaru y Daihatsu. Venden 10,5 millones de unidades anualmente.
Un nuevo gigante.
Antes de culminar 2019 se hizo oficial una nueva fusión que cambió el panorama y reacomodó muchas cifras. Se trata de la unión de dos grupos, FCA y PSA. 12 marcas quedan bajo esta carpa y por sus ventas se ubicarían en el cuarto lugar, en volumen, y el tercero por ingresos.
Los participantes son Fiat-Chrysler Automobiles, que nació en 2014 cuando el Grupo Fiat compró la totalidad de Chrysler. Actualmente es el séptimo fabricante mundial, con marcas como Fiat, Chrysler, Dodge, Jeep, Maserati, Alfa Romeo y RAM.
El otro grupo participante en esta nueva fusión es PSA, nacido en 1976 en París, tras las fusiones de las marcas Peugeot, Citroën, Simca y Talbot, las dos últimas ya desaparecidas. En los últimos años PSA adquirió a Opel, Vauxhall y DS, convirtiéndose en el segundo constructor más grande de Europa tras Volkswagen. Una de las grandes ventajas que tiene esta organización es que cuenta con el apoyo del gobierno francés y tiene un desarrollo de modelos electrificados bastante adelantado, además del conocimiento tecnológico que heredará de esta marca alemana.
Lo que viene
La fusión se hará completa a comienzos de 2021 y por ahora empieza todo el movimiento logístico y de negociación para ver qué hay y qué queda. Ahora surgen conjeturas sobre el futuro de algunas marcas, e incluso se habla ahora sí de la desaparición definitiva de Lancia, que solo ofrece un modelo, el Ypsilon, y únicamente en Italia.
También se rumora que desaparecerían del catálogo los Fiat 500 y Panda con motores de combustión, dejando únicamente la alternativa eléctrica, si es que llega a desarrollarse, porque la fuerte competencia de este tipo de carros contra las SUV urbanas los tiene prácticamente contra las cuerdas en su principal mercado, Europa, además de la gran inversión que debe hacer el fabricante para cumplir con las estrictas normas de emisiones y como este es un segmento que no deja muchas ganancias, no sería viable aplicar esa tecnología.
11
millones de unidades al año vende el Grupo Volkswagen, el más grande del mundo.
Te puede interesar
El empleo que busca está a un clic
