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Clínica de la 80 tiene nuevo dueño: Alcaldía no pudo comprarla
Clínica Vida se quedó con el negocio. Desde diciembre, la administración sabía que no podía comprarla.
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La Clínica de la 80 atendió a 6.154 pacientes, entre el 23 de julio de 2020 y el 31 de
octubre de 2021. FOTO manuel saldarriaga
24 de febrero de 2022
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A partir de julio de este año la conocida Clínica de la 80 comenzará a atender pacientes otra vez. En esta ocasión será bajo la coordinación de la Fundación Colombiana de Cancerología Clínica Vida, que este 23 de febrero firmó una promesa de compraventa con la EPS Saludcoop en liquidación. El nuevo dueño de la clínica es una organización sin ánimo de lucro que lleva 30 años atendiendo pacientes con cáncer en Antioquia.
Francisco Lozano, gerente de la entidad, confirmó que el negocio materializa los planes de expansión de la organización con una sede de esta magnitud que fue construida originalmente para prestar servicios de mediana y alta complejidad.
Este negocio que se cerró con la EPS Saludcoop en liquidación, tras varias semanas de especulaciones, se dio por un valor de venta de $96.500 millones, informó Felipe Negret Mosquera, agente liquidador de Saludcoop.
Asimismo, indicó que $16.500 millones los desembolsa la Clínica Vida al momento de suscribir la promesa y los $80.000 millones restantes los obtiene por medio de un crédito con el banco Davivienda. Una vez que este último desembolse dichos recursos, el agente liquidador procederá a entregar el bien, lo cual podría ocurrir en marzo próximo.
“Fue una venta transparente, que pasó los filtros necesarios, fue apalancada con un crédito del sector financiero y tiene todas las salvaguardas a quien se le vendió”, dijo Negret.
Alcaldía no logró comprar
Antes de entregar el lugar se debe materializar la devolución de la clínica al agente liquidador por parte de la Alcaldía de Medellín, que la tenía en comodato precario, es decir, a título gratuito, desde marzo de 2020, con el fin de fortalecer la atención en salud durante la pandemia, con lo cual atendió 6.154 pacientes, entre el 23 de julio de 2020 y el 31 de octubre de 2021.
Ahora que la Clínica Vida se queda con este inmueble se pierde cualquier posibilidad de que el Municipio la adquiera, tal como siempre lo deseó el alcalde Daniel Quintero. De hecho, en algún momento aseguró que ya habían presentado una propuesta económica para comprarla y que contaban con los recursos para hacerlo: en ningún caso podía ser menos de los $96.500 millones, pues el dinero de esta transacción lo debe usar Negret para pagarles a los acreedores de Saludcoop de todo el país, lo mismo que cuando venda las clínicas ubicadas en otras ciudades.
En últimas, la razón por la que la Alcaldía no podía comprar la Clínica de la 80 radica en que ninguna entidad pública del orden nacional, departamental o municipal podía hacer un negocio con la EPS Saludcoop, pues tiene una sanción fiscal vigente, cuyo efecto es de cinco años. Y así lo comunicó Negret de forma oficial, el pasado 30 de diciembre, al alcalde Quintero, a su secretario de Hacienda, Óscar Hurtado, y a la secretaria Privada María Camila Villamizar.
En días pasados, el alcalde expresó que el Congreso aprobó una ley que permitía que el Gobierno Nacional le comprara la Clínica de la 80 al agente liquidador de Saludcoop y se la entregara al Municipio, pero que el Ejecutivo dejó vencer esa ley y no se logró la transacción.
Fuentes cercanas al proceso contaron que el agente liquidador y la administración municipal quedaron en buenos términos, ya dieron por finalizado el contrato de comodato y están pendientes de una visita conjunta para determinar cuáles equipos y elementos son de la Alcaldía y cuáles quedan en propiedad de Clínica Vida.
El asunto aquí es que desde el comienzo, en el contrato de comodato, las partes aceptaron que el dinero invertido por la administración en la adecuación de este espacio mientras estuviera en préstamo no sería reconocido por Saludcoop.
Dicho de otra manera, es un principio legal que las inversiones pasan al propietario del bien. Allí la Alcaldía invirtió $23.744 millones en adecuaciones locativas y se ha dicho que se podrían perder unos $6.962 millones por costos de bienes de infraestructura que no pueden sacarse, como muros, puertas, adecuaciones en ascensores, techos, impermeabilización, paredes, limpiezas, redes hidrosanitarias y eléctricas, etc.
Sin embargo, Quintero aseguró que con el pago por atención a los pacientes que hicieron las EPS al Hospital General de Medellín (que operó la clínica durante el comodato) se recuperó la totalidad del dinero. Para saberlo con certeza se deben dar a conocer los estados de inversión versus las utilidades.
De cualquier forma, dijo Quintero, los $96.500 millones que la Alcaldía estaba dispuesta a pagar por la Clínica de la 80 se destinarán a la construcción de la Clínica del Norte, una de las prioridades de esta administración, que se incluyó en el programa de gobierno.
La fundación informó que en la clínica ubicada en Belén se prestarán desde el segundo semestre servicios especializados en oncología de alta complejidad, es decir, para pacientes con cáncer. Entre la dotación que la Clínica Vida ha anunciado hasta el momento se encuentran 200 camas para hospitalización individual, 10 quirófanos, 20 cubículos para inmunoterapia y 80 cubículos para quimioterapia.
Con ello se busca habilitar servicios como salas de quimioterapia e inmunoterapia; hospitalización de alta complejidad en cáncer, cardiología y trauma mayor (100% camas individuales); radioterapia con equipos de última tecnología; braquiterapia, medicina nuclear; trasplante de médula ósea y cirugía de alta complejidad en cáncer.
96.500
millones de pesos fue el valor total de la compra de la Clínica de la 80.
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