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Un grupo de 65 indígenas llegó desplazado a Medellín tras huir de su resguardo en El Carmen de Atrato, en el Chocó, donde estaban confinados por cuenta de hechos violentos que atentan contra su integridad.
La comunidad indígena llegó atemorizada este miércoles 25 de mayo a las instalaciones de la Personería de Medellín, donde manifestaron que salieron de su territorio porque allí no cuentan con garantías de seguridad y temen por sus vidas.
Contaron que el 10 y el 11 de mayo pasados fueron intimidados por grupos armados al margen de la ley con disparos y marcación de sus viviendas, lo que los obligó a confinarse. Sin embargo, las imposibilidades de movilizarse en el territorio para realizar sus actividades cotidianas y la presencia de los armados los llevó a desplazarse hacia la capital antioqueña.
Sonia Peña, líder del Grupo de Asuntos Étnicos, Migrantes y Refugiados de la Personería de Medellín, explicó que en la sede del Ministerio Público les tomaron las declaraciones y se activaron las rutas de atención. Posteriormente, se convocó a una reunión con la Alcaldía de Medellín y la Unidad para la Atención a las Víctimas, con el fin de poner en marcha las acciones para proteger a los indígenas, entre los que hay varios niños y niñas.
Por el momento, la comunidad está en un albergue de la administración municipal, donde reciben alimentación y se suplirán sus necesidades básicas por un periodo inicialmente de 15 días.
Este jueves, anotó Peña, también se hará una reunión con las instituciones responsables de atender estos hechos para tomar otras decisiones y prepararse ante la posible llegada de más indígenas que vendrían en camino según relataron quienes ya están en Medellín.
“Los líderes nos dicen que son unas 300 personas en la comunidad, de las cuales han llegado 65. La idea es prepararnos”, indicó la funcionaria. Asimismo, se hará articulación con la Gobernación del Chocó e instituciones de ese departamento para que tomen otras acciones que prevengan más desplazamientos.