Luego de cinco días en alerta naranja, la junta de alcaldes reunida en el Área Metropolitana del Valle de Aburrá levantó la medida, argumentando que “las concentraciones horarias de las estaciones de PM 2.5 (partículas emitidas por quema de combustibles fósiles y que, por su tamaño, son las que más afectan la salud humana) han permanecido estables durante la tarde de hoy lunes”.
Como consecuencia, cuatro de las cinco estaciones de medición de la calidad del aire pasaron a amarillo; es decir, tienen una calidad de aire moderada y con menos de 35 microgramos de partículas contaminantes por cada metro cúbico de aire.
Según el radar de calidad del aire del Sistema de Alerta Temprana de Medellín, Siata, solo la estación del Cerro El Volador permanecía aún en naranja, con 37 microgramos de PM 2.5 por cada metro cúbico de aire.
Las otras dos estaciones que aparecieron en naranja fueron las de La Estrella y el Museo de Antioquia, pero ninguna de ellas es considerada dentro del Protocolo de Episodios Críticos de Contaminación pues están ubicadas en zonas de alto tráfico y no son de representatividad poblacional.
Para levantar la alerta, los alcaldes tomaron en consideración que los vientos y el clima de las últimas horas favorecieron la dispersión de las partículas contaminantes.
El Área Metropolitana prevé que durante la Semana Santa bajen aún más los niveles de contaminación en el aire pues muchos de los residentes del Valle de Aburrá salen de vacaciones y la circulación de vehículos desciende notablemente.
