En redes sociales, sobre todo en X, ha crecido la polémica estos días por el aterrizaje de dos personas a la Cancillería en cargos considerados técnicos o de carrera.
Se trata de la dirección de cooperación internacional y de la Academia Diplomática Augusto Ramírez Ocampo. La canciller Rosa Villavicencio designará en esos puestos a Harol González, quien venía de ser vicepresidente de relaciones internacionales del partido Colombia Humana y Laura García Mejía, madre de la representante a la Cámara María del Mar Pizarro y expareja del excomandante del M-19 asesinado Carlos Pizarro.
González, según la postulación, es profesional en Estudios Políticos y Relaciones Internacionales; también tiene un pregrado en Administración Deportiva. Es magíster en Ciencias Sociales, Cooperación y Desarrollo de América Latina y cursa un doctorado en la Universidad Sorbona Nueva de París.
La polémica en este caso viene asociada a que reemplazará en el cargo a Bertha Patricia Alemán, funcionaria de carrera; tradicionalmente ese cargo ha estado reservado para funcionarios de carrera que trascienden el gobierno de turno.
Bajo este Gobierno, se había nombrado en la Academia a la exministra de Ambiente, Lena Estrada.
“Tiene más de 30 años de experiencia en el sector”: Pizarro
En el caso de García, es politóloga, profesional en Resolución de Conflictos de la Universidad del Valle, y especialista en Administración Pública Contemporánea.
Su hija, la congresista María del Mar Pizarro, defendió el nombramiento en redes sociales: “Es mi mamá, Laura García, tiene más de 30 años de experiencia en el sector. En su tiempo como directora de Cooperación Internacional logró la donación más grande de la Unión Europea. Fue madre soltera, estudió los fines de semana y trabajó arduamente durante décadas para llegar hasta aquí”.
Además, Pizarro aseguró que su madre ha trabajado en varios gobiernos.
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