El asesinato de Roberto Vega Daza y dos colombianos más en Valencia, el pasado martes, no solo conmocionó el mundo judicial de España, sino que volvió a poner en la agenda pública la guerra que libran distintas bandas criminales por el control del narcotráfico y más negocios ilegales en Barranquilla y otros lugares del Caribe colombiano.
Según las autoridades españolas, aún es muy pronto para determinar qué fue lo que pasó y por qué los tres cuerpos fueron botados en un carro en una vía de la pedanía de El Saler, hasta donde llegó la Guardia Civil española por la alerta de los vecinos.
En Barranquilla, sin embargo, después de confirmada la muerte del último del clan Vega Daza en España, sucedieron cosas muy extrañas. Un hombre, por ejemplo, pintó un llamativo graffiti usando aerosol rojo sobre el portón del garage de la casa de la familia, señalada de actividades criminales y de narcotráfico por las autoridades locales. “Game Over los Vega”, pintó, mientras otra persona lo esperaba en una motocicleta.
Y la noche del mismo martes, en el exclusivo sector de Villa Campestre, en las afueras de Barranquilla, donde está ubicada la casa, desconocidos lanzaron por largos minutos juegos pirotécnicos a modo de celebración. Igual que como ocurrió el pasado 29 de junio de 2023, cuando fueron acribillados Rafael Julio Vega Cuello, el padre del clan, conocido como Kike Vega; y sus hijos Ray Jesús y Ronald Iván Vega Daza. Atentado al que sobrevivió Roberto, aunque resultó herido en la pierna derecha al recibir un impacto de fusil.
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Lo nuevo de esta cadena de sucesos aterradores es que en varios puntos del centro de Barranquilla, en los alrededores de la zona comercial antes conocida como San Andresito, también aparecieron grafitis haciendo alusión a la muerte de Roberto y sus familiares, pero ahora con un mensaje directo para otra persona.
Sobre las paredes azules del lugar y algunos de los portones metálicos se puede leer: “Game over los Vega, off, faltas tú Mairon”. Los comerciantes de la zona se declararon asustados por el mensaje, porque dijeron sentir temor que en cualquier momento se produzca un ataque. Eso sí, dijeron no tener conocimiento de quién es la persona a la que se refieren en el graffiti.
Dos investigadores judiciales de Barranquilla que hablaron con EL COLOMBIANO señalaron que el nuevo mensaje va dirigido a Mairon José Bustamante Pérez, cuñado de otro reconocido criminal, Digno Palomino, jefe de la banda Los Pepes Costeños y quien está preso en la cárcel de máxima seguridad de Girón (Santander) desde noviembre pasado, a donde fue trasladado por liderar una poderosa red de extorsión.
De Mairon Bustamante se sabe que hace unos cinco años fue citado a declarar en la Fiscalía de Barranquilla y que fue acusado de manejar las redes sociales de Palomino.
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Pero, esos días, Bustamante afirmó que los señalamientos eran falsos y que se dedicaba al comercio, específicamente a la venta de electrodomésticos. Para entender el porqué del mensaje a Mairon hay que revisar el pasado reciente, cuando los Vega Daza se declararon en guerra con la banda Los Costeños.
Hace un año, por ejemplo, fueron distribuidos en Barranquilla panfletos en los que se señalaba como “Los más buscados” a Kike Vega y a sus tres hijos, junto a otras tres personas más, allí se mencionaba a Digno Palomino.
Según trascendió, los carteles fueron pagados por Jorge Eliécer Díaz Collazos, alias Castor, el ex mejor amigo y socio de Palomino, también reconocido como líder de la peligrosa banda Los Costeños, quien también está preso.
El lío es que la relación entre Díaz y Palomino terminó muy mal, el motivo de la pelea sería que Castor quería buscar acercamiento con el Gobierno para someterse a la justicia y ser gestor de paz y su antiguo socio se negó. Así que los Vega acabaron asociándose con este último, que creó su propia banda llamada Los Pepes Costeños.
Castor, según las autoridades, también tiene muy buenas relaciones y negocios con el Clan del Golfo y carteles extranjeros del narcotráfico. En medio del enfrentamiento de las bandas fue asesinado el padre de Castor. Y en junio pasado fue ejecutado el plan criminal en contra de los Vega en su casa de Villa Campestre.
Por eso, algunos creen que las conexiones de Castos tendrían algo que ver con la muerte de Roberto Vega Daza en Valencia. Pero hasta ahora las autoridades españolas no han confirmado nada.
