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Cuidar los pies no es solo cuestión de arreglarlos para lucir un calzado descubierto o para ir de vacaciones. La revisión constante de esta parte del cuerpo debe darse, además de estética, por salud, al tener la gran responsabilidad de soportar el peso del cuerpo y permitir el movimiento.
Cuidarlos no debe solo se traduce en darles color y decoración a las uñas, también es de prevención y de saber dónde y a quién se pone su cuidado.
“Uno tiene la mala costumbre de creer que las salas de belleza son el sitio donde pueden mejorar las callosidades y los dolores de los pies. El contacto piel con piel genera una sensación tan agradable que se siente un descanso grande, pero no siempre es así, es necesario saber que el lugar en el que estamos ingresando tiene las medidas de bioseguridad suficientes para evitar que nos llenemos de hongos, enfermedades o lesiones. Nadie está exento de generar un corte durante el arreglo del pie y si los instrumentos están infectados eso sería bastante grave”, advierte la podóloga Zulma Suárez.
Cómo cuidarlos
Para la experta, las medidas de precaución en el cuidado de los pies son fundamentales, aquí da cinco recomendaciones para evitar algunos errores que se cometen con frecuencia.
1. Revisarlos con cierta periocidad
Es necesario explorar los pies diariamente. Al examinarlos se asegura una buena salud y un aspecto perfecto. La revisión debe comenzar por el dorso del pie, se debe tocar para determinar que no se estén formando callosidades o identificar algún cambio de textura en la piel, estar atentos ante cualquier cambio de color o grosor que, generalmente, ocurre por presiones inadecuadas. También es necesario observar las uñas para identificar cambios en su color, revisar y secar muy bien la piel después del baño, en lo posible dejarlos expuestos unos minutos sin medias o zapatos para el secado completo.
2. Evite pintar las uñas con frecuencia
La cuestión no es tenerlas siempre despintadas, sino retirar el esmalte a la mayor brevedad, máximo tenerlo de 15 a 20 días. La razón es que esta sustancia sella la uña y si hay presencia de hongos o alguna otra alteración se propicia el desarrollo y la propagación. Parte de la higiene es retirar el esmalte y dejar descansar la uña para que se airee, se ilumine y descanse de la presión que genera el esmalte.
3. No usar talco directo en la piel
Estos polvos no suelen ser un buen aliado del pie, dado que retienen mayor humedad y pueden generar problemas como dermatitis, alergias o ser caldo de cultivo para que los hongos se desarrollen. Usar talco directo en los pies para evitar la sudoración y el mal olor no es recomendable debido a que la piel se reseca y el pH se altera. Lo ideal es hidratarlos con crema, hacer exfoliación regularmente y en caso de sudoración extrema, usar el talco dentro del zapato horas antes de usarlos.
Otra alternativa, si la sudoración es extrema, es usar leche de magnesia para neutralizar el crecimiento de las bacterias y evitar que el sudor sea metabolizado y haya mal olor, así se puede controlar la transpiración. También es recomendable usar cremas hidratantes, dermatológicamente formuladas, “que contengan urea, ácido láctico, alantoína y aceites naturales, como el de almendras. Además de exfoliantes y un cepillo de uñas para evitar que la mugre se acumule”, sugiere la podóloga.
4. Evite el uso exagerado de tacones
El calzado adecuado es de las medidas más importantes para cuidar la salud del pie. Un tacón de más de cinco centímetros provoca mal apoyo en las piernas y aumenta problemas como dolores en rodillas, tobillos, la presencia de los callos plantares o sobre los dedos, juanetes y dedos en garra. Los callos son la consecuencia de malos apoyos, de un roce excesivo con el zapato y hay que corregir la postura de los pies para evitar que estos aparezcan.
5. Nunca compartir el cortaúñas
Este es un objeto tan personal como el cepillo de dientes. Por su forma circular al cortar, tiende a dejar puntas pronunciadas al final de la uñas, que deben limarse y retirarse para evitar que maltraten la piel o se encarnen provocando dolor e infección.
Interesada en los temas médicos de carácter nacional e internacional. Me gusta, a través de historias con amplia investigación, destacar los avances y logros en la medicina.