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“Encanto” de Disney, ¿obligada a reflejar la identidad colombiana?

  • La película, que contará con música compuesta por Lin-Manuel Miranda, se estrenará en noviembre de 2021 en cines. Imagen: cortesía Disney Animation Studios
    La película, que contará con música compuesta por Lin-Manuel Miranda, se estrenará en noviembre de 2021 en cines. Imagen: cortesía Disney Animation Studios
14 de diciembre de 2020
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A Mauricio Babilonia lo seguía un racimo de mariposas allí a donde fuera. Eran amarillas, pensó un día Renata Remedios, como si hubieran nacido en la luz, y de un sofocante aleteo, notó impaciente en una ocasión Aureliano Segundo. Fueron premonición de los encuentros a hurtadillas de Remedios y Babilonia, auspiciados por las letras de Gabriel García Márquez, y fueron el revoloteo incesante de fondo de la primera cita entre Disney y Colombia.

Tardó 36 segundos, lo suficiente para dejar un sabor dulce y anhelante. Así lo tomó el público, que inundó las redes sociales repitiendo una y otra vez el “Encanto” del teaser (adelanto) de la primera película animada que la gran productora escenifica en Colombia. No la primera en Latinoamérica, en la que hasta el pasado Halloween todavía había quien juraba personificar los personajes de “Coco”, la película que universalizó, aún más, el tradicional Día de los Muertos mexicano.

“Hacen parte de una estrategia de transnacionalización de contenidos. Una localización que parte de una identificación de unos temas culturales claves, en el caso de Coco una tradición mexicana alrededor del Día de los Muertos, y los presenta con un tono global”, analiza Verónica Heredia, crítica e investigadora de cine de la Universidad de Medellín. “Al girar sobre temas culturales, despierta generalmente dos reacciones: los que exaltan y los que critican el funcionamiento de ese producto comercial”.

La línea entre la representación y exaltación cultural y la apropiación y banalización de lo que se entiende como identidad, cualquiera que esta sea, parece ser una delgada frontera que amenaza con expulsar cualquier contenido a tierra de nadie. Lee Unkrich, quien escribió y dirigió Coco, reconoció en una entrevista en The New York Times (NYT) de 2017 el profundo temor a que su película “cayera en el cliché o el estereotipo”.

Recursos hollywoodenses que pintaron durante décadas a Bogotá en un trópico constante con palmeras y gallinas en hoteles. Para evitarlo, Unkrich viajó varias veces a México y se rodeó de consultores culturales latinos que le hablaron al oído durante todo su proceso creativo. Esto permitió, por ejemplo, que en el camino decidiera que la abuela Coco no reprendería a Miguel con una cuchara, algo que los consejeros le dijeron no correspondía a la realidad, según contó en NYT, y sí con una chancla.

Lo que uno esperaría con esta película que se ambienta en Colombia es que el país sea más que un paisaje”, señala Diego Agudelo, crítico de series y de cine. “Un desarrollo que cuente con asesores y trabajo de campo que le permitan a Disney salirse de esa camisa de fuerza que la contiene a compañía frívola que se apropia de rasgos culturales sin que eso represente una reivindicación de esa cultura”.

Una posibilidad de afianzar el vínculo de Disney con un público que es importante para la empresa en lo comercial, agrega Samuel Castro, escritor, guionista y crítico de cine. La región suele responder masivamente a los experimentos y lanzamientos de la compañía.

El último ejemplo es Disney Plus, que solo 17 días después de su lanzamiento (a corte de 3 de diciembre) había sido descargada más de 9 millones de veces, con amplio liderazgo de Brasil y México, con 3 y 2,8 millones de descargas respectivamente, según estimaciones de Airnow Data. En Colombia va en 562.300.

“Estos productos continúan el proceso de identificación que busca Disney en las personas: que cada quien se vea reflejado de alguna manera con uno de sus personajes o historias”, aseguró Castro.

De Encanto no se conoce mucho. Páginas especializadas pero no oficiales rumiaron la idea de que el largo girará en torno a Maribel (O Mariana, según aparece en otras supuestas filtraciones), una niña de una mágica familia colombiana en la que ella, justamente, es la única que no cuenta con poderes especiales. Al igual que con Coco, los expertos esperan pequeños guiños al día a día colombiano y una especial presencia del Realismo Mágico de Gabriel García Márquez.

Es probable que nos topemos con personajes muy macondianos. Hay que tener claro que cualquier producto cultural es una creación, que puede o no tener una base, pero que como adaptación sufre cambios”, señala César Ramírez Leguizamón, docente de cómics y cine fantástico de la Universidad Pontificia Bolivariana. Porque a todas estas, ¿qué es eso que llaman “identidad” y por qué la especial necesidad de protegerla?

Sobre la identidad

La Real Academia de la Lengua Española define la identidad como un conjunto de rasgos propios de un individuo o de una colectividad que los caracterizan frente a los demás. Ya Giovanni Pico Della Mirandola, uno de los más importantes exponentes de la filosofía del Renacimiento, se refirió (no literalmente) a la identidad en un discurso que redactó entre 1486 y 1487 y que hoy es considerado como un texto fundamental del humanismo renacentista. Allí, en “Discurso sobre la dignidad del hombre”, defendió la noción del hombre como un ser sin identidad.

Escribió Pico que tras la creación del mundo y de su variedad casi infinita de animales, el sumo Padre deseaba dar vida a alguien que tuviera la capacidad de admirar todo lo que había construido. Se propuso crear al hombre. Ya en medio de la tarea, fue consciente de que todos los tesoros y arquetipos ya habían sido otorgados a otras criaturas. Decidió, entonces, “que aquel a quien no podía dotar de nada propio le fuese común todo cuanto le había sido dado separadamente a los otros. Tomó por consiguiente al hombre así construido, obra de naturaleza indefinida.

“La naturaleza definida de los otros seres está constreñida por las precisas leyes por mí prescritas. Tú, en cambio, no constreñido por estrechez alguna te la determinarás según el arbitrio a cuyo poder te he consignado”, le dijo al hombre. “(...) A él le ha sido concedido obtener lo que desee, ser lo que quiera”.

Si el cine puede intentar reflejar esa humanidad variable e infinita, ¿por qué encasillarlo a una identidad, aún si esta se etiqueta como colombiana?, se pregunta Sebastián Duque, guionista con estudios en la Escuela de Cine de Canarias. “Pasa, entonces, porque la película sea verosímil y no se vaya por el camino fácil de la caricaturización. Que todos podamos encontrar en Encanto una representación de una emoción que hayamos experimentado en nuestra vida”.

Desde el cine de animación la aproximación ha sido celebrada. Disney y Pixar ya se habían acercado a la región con UP y Coco, recuerda Agudelo, “y lo que uno ve en esas películas es que los países sirven como marco de una historia”. “Encanto” llegará a los cines en noviembre de 2021. Solo en ese momento se podrá saber si el trabajo estuvo bien hecho (como en Coco), finaliza Samuel Castro, “o fue una chapuza”.

Las mariposas amarillas eran antesala del encuentro en Macondo y también presagio de mala suerte si se divisaban de noche, como lo creía Fernanda del Carpio, madre de Renata. Fue un conjunto nocturno de esos bichos lo que terminó definiendo el amor de la pareja y el final de su historia. Una historia que Disney y Colombia apenas comienzan a escribir.

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