El cantautor argentino Fito Páez se prepara para presentar su último álbum de estudio, La Ciudad Liberada por primera vez en el Carnegie Hall, uno de los escenarios con mayor reconocimiento en la Gran Manzana.
Dijo que la música que se crea hoy no tiene el mismo peso que tenía en los años 70, cuando se utilizaba como instrumento de protesta frente a regímenes militares.
“Posiblemente se pueda observar ahora una música no tan rica como fue en el siglo XX. Pero en la música no hay enemigos. Más allá de que alguien haga un género u otro, (...) es una expresión para juntar los corazones”, señaló.
El artista se está centrando en la preparación de su concierto en Nueva York, un único recital que tendrá lugar el próximo 28 de septiembre en el Stern Auditorium del Carnegie Hall, con capacidad para 2.800 personas.
“¿Quién puede tener esto en mente?”, afirmó el rockero argentino, que recordó haber acudido al Carnegie en repetidas ocasiones para asistir a eventos musicales. Fantaseó con la posibilidad, pero nunca se planteó que pudiera convertirse en realidad.
“A veces los sueños se cumplen, pero esas cosas nunca son objetivos planeados, sino que siempre surgen de la marea de la vida y son situaciones de mucho placer”, explicó.
Páez describió el Carnegie Hall como “la sala más hermosa del mundo” y apuntó que la posibilidad de ofrecer un recital en ese lugar es una “situación especialísima”.
No quiso dar detalles sobre las canciones que formarán el espectáculo, pero sí desveló que repasará su discografía completa, compuesta por 23 producciones de estudio.
“Voy a incluir músicas de todos los álbumes y haré un recorrido por todos estos años de carrera. Incluso voy a estrenar temas”, entre ellos un instrumental que se llama La Familia.
Frente a este próximo concierto de peso, Páez reflexionó sobre su carrera y señaló que para él la música “es una forma de vivir”.
“Yo nunca planee cosas, como ‘voy a hacer un disco que va a ser así para que tenga éxito’. Mi tarea siempre fue muy solitaria en ese sentido y muy hermosa y de mucha libertad”, subrayó el cantautor.
“Todas las cosas que me fueron sucediendo, incluso las contrariedades, son materia de aprendizaje y sirven para poder seguir construyendo y seguir contando cosas al mundo, que al final es el objetivo de cualquier artista”, apuntó.
