Fue la noche de los que ya no están, de los grandes artistas que murieron en 2016 y que en esta edición 59 de los Premios Grammy fueron recordados con homenajes, lágrimas en los ojos y mucha emotividad.
Los ganadores de la noche fueron británicos. El primero ya murió, la segunda tiene 28 años y una carrera llena de récords, premios y fanáticos regados por el mundo.
David Bowie ganó los Grammy que nunca ganó en vida. Su álbum Blackstar, ese que lanzara dos días antes de morir, su vigésimo quinto álbum de estudio, consiguió 5 galardones, los premios a Mejor interpretación rock, Mejor canción de rock, Mejor álbum de música alternativa, Mejor ingeniería de un álbum no clásico y Mejor diseño de empaque.
Estos fueron los primeros Grammy musicales que consiguió el fallecido artista ya que nunca en la historia de estos premios había conseguido alguno por sus discos. El único gramófono que tenía lo consiguió en 1984 y en la categoría de Mejor video en formato corto, por Jazzin for Blue Jean.
Por su parte Adele, se llevó también cinco gramófonos a casa, como Canción del año, Grabación del año, Mejor interpretación pop solista por Hello y, Álbum del año y mejor álbum pop con 25. La artista, tan sensible como siempre en estas galas, lloró al recibir los últimos premios y agradeció a Beyoncé la inspiración que ha recibido de ella en su carrera.
James Corden, quien por primera vez se enfrentaba al público de los Grammy salió airoso en su introducción donde presentó sus dotes de bailarín, cantante y humorista. No podía faltar la mención a Trump en un mensaje rapeado “vivan todo, porque esto es lo mejor, y con el presidente Trump, no sabemos que viene” y la mención a su famosa sección Carpool Karaoke donde simuló estar en un carro con Jennifer López, Neil Diamond, John Legend y otros artistas.
El presentador tuvo tiempo para improvisar e incluso apoyar a Twenty One Pilot quienes salieron a recibir el Grammy como Mejor canción de pop de un dúo o grupo por Stressed out sin pantalones como parte de una promesa hecha cuando soñaban llegar a ese escenario. Después de recibir el premio, Corden salió a presentar al siguiente artista, así, sin pantalones.
El polémico espectáculo
Sin duda esta edición de los Premios Grammy será recordada por grandes tributos, shows que quedarán en la memoria de los espectadores y errores en vivo.
Adele tuvo dos momentos en la noche de los Grammy. La británica comenzó la gala cantando Hello, tema que marcó su retorno después de tres años de ausencia y que consiguió ser número uno en la lista de canciones más descargadas de iTunes en más de 85 países el día de su lanzamiento.
Adele sabía que tenía que resarcir el error del año pasado cuando sufrió un percance con su micrófono al cantar All I ask y sonó desafinada de cuenta de un problema técnico.
“El micrófono del piano se cayó a las cuerdas, eso era lo que se oía como una guitarra. Por eso sonó fuera de tono”, dijo la artista en su cuenta de Twitter un día después de la gala.
Esta vez interpretó Hello con la sencillez y tranquilidad que la caracteriza y recibió el aplauso efusivo del público que estaba en el Staples Center de Los Ángeles presenciando la ceremonia.
En un segundo momento, y para rendir tributo al fallecido George Michael, la cantante se equivocó al inicio de la canción e hizo parar la orquesta, “lo siento pero tengo que volver a empezar”, dijo al inicio de Fast Love, la canción que interpretó para homenajear a su compatriota.
Al fina de la presentación, la cantautora con lágrimas en los ojos agradeció al público los aplausos pero dejó ver su descontento por un espectáculo que no salió como quería pero con el que logró que muchos asistentes se emocionaran recordando al británico quien murió el pasado 25 de diciembre.
Otro momento inolvidable de la noche corrió de cuenta de Metallica y Lady Gaga, la colaboración con el tema Moth into flame que parecía inusual por los géneros tan disímiles de ambos artistas, sonó poderosa a pesar del bochornoso incidente con el micrófono del vocalista de la banda James Hetfield. Comenzó la canción y el micrófono no funcionó y así siguió en los primeros minutos. El artista recurrió a cantar con el micrófono de Gaga con notoria molestia por lo sucedido. Arreglaron su micrófono, se ubicó de nuevo y siguió el espectáculo pero Hetfield pateó la base del mismo al finalizar la presentación y se retiró del escenario.
Capítulo aparte merece Beyoncé. La artista embarazada realizó un show lleno de efectos especiales para cantar sus temas Love Drought y Sandcastles del álbum Lemonade con proyecciones de video con su madre y su hija, rodeada de pétalos, y hasta cientos de mujeres en pantalla.
La artista de 35 años, quien tiene acostumbrado al público a intensas coreografías, esta vez apeló a la sencillez de movimientos más no de tecnología y consiguió una de las presentaciones más admiradas de la noche.
En cuanto a los tributos, además del realizado a George Michael, también hubo emoción al recordar la banda sonora de la película Fiebre de sábado en la noche que este 2017 cumple 40 años. El único sobreviviente de los hermanos Gibb, Barry de 70 años, asistió a la ceremonia para ver cómo Demi Lovato, Tori Kelly, Little big town y Andra Day entonaron algunas canciones de la película como Stayin Alive y How deep is your love.
Ya previo al espectáculo John Travolta, actor en la cinta, había anunciado este homenaje a uno de los grupos más importantes de la música de los años 70.
Continuó el momento de Bruno Mars. El artista hawaiano tuvo dos grandes instantes en la ceremonia. El primero al interpretar una nueva canción de su disco 24k Magic llamada That’s what I like, un show en donde hizo lo suyo, cantar y bailar con su grupo y que aplaudieron de pie sus pares en la gala.
El segundo, en el homenaje a Prince que compartió con la agrupación The Time, banda creada por el mismo Prince en Minneapolis para que le sirviera de salida musical ante sus problemas con Warner Bros. Este primer show fue toda una remembranza a su majestad púrpura para que luego Mars cerrara con broche de oro y la canción Let´s go crazy.
Bruno Mars, quien de niño imitara a la perfección a Elvis Presley y en algún momento fuera catalogado como la esperanza creativa del pop comparándolo con la capacidad única de Michael Jackson, demostró que también calza en un zapato la energía, la genialidad y la necesidad de reinventarse del Prince.
Un homenaje que fue tendencia en redes sociales.
Otras presentaciones destacadas fueron la de Ed Sheeran quien demostró sus dotes musicales con su nuevo sencillo Shape of you. También se destacaron Chance the rapper, Alicia Keys con MarenMorris y Carrie Underwood con Keith Urban.
Otros premios
El primer ganador de la noche fue Chance The Rapper, quien consiguió el galardón como Mejor artista nuevo para con ello edificar su carrera en el mundo del rap.
En esta categoría han obtenido el Grammy en años anteriores artistas de la talla de Adele, Sam Smith, Amy Winehouse, Maroon 5, Alicia Keys, Mariah Carey y Cyndi Lauper.
El joven rapero originario de Chicago le quitó el gramófono a los favoritos The Chainsmokers, grupo al que críticos musicales daban como seguros ganadores.
Beyoncé también ganó varios galardones, Mejor álbum urbano contemporáneo por Lemonade. “Mi intención con este disco visual fue crear una voz en el dolor para enfrentar temas que nos hacen sentir incómodos (...) gracias a mis fanáticos, a mi familia y a todo el público”, dijo al recibir el premio. La cantante ganó también en la categoría Mejor video musical por Formation.
La cuota colombiana en los premios, Fonseca, Sanalejo, el Grupo Niche y Shakira, no se llevaron ningún gramófono esta vez.
Esta es la lista de algunos ganadores de la noche:
Grabación del año: Hello, Adele.
Álbum del año: 25, Adele.
Canción del año: Hello, Adele.
Mejor nuevo artista: Chance The Rapper.
Mejor interpretación pop solista: Hello, Adele.
Mejor interpretación pop dúo o grupo: Stressed Out, Twenty One Pilots.
Mejor álbum pop: 25, Adele.
Mejor grabación dance: Don’t Let Me Down, The chainsmokers.
Mejor intepretación rock: Blackstar, David Bowie.
Mejor interpretación metal: Dystopia, Megadeth.
Mejor canción rock: Blackstar, David Bowie.
Mejor álbum de rock: Tell Me I’m Pretty, Cage The Elephant.
Mejor álbum alternativo: Blackstar, David Bowie.
Mejor álbum contemporaneo urbano: Lemonade, Beyonce.
Mejor álbum latino: Un besito más, Jesse & Joy.
Mejor álbum tropical: ¿Donde Están?, Jose Lugo & Guasábara Combo.
(Vea aquí: lo mejor y lo peor de la alfombra roja de los Grammy)