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El triunfo de etapa, el 4 de diciembre del año pasado, en el ascenso a Salento, le permitió a una jovencita con apenas un año en el ciclismo, ganarse el respeto del pelotón femenino nacional.
Era Daniela Atehortúa, la antioqueña de 20 años que se imponía en la segunda fracción de la Vuelta a Colombia Femenina sobre la tricampeona de la competencia, Ana Cristina Sanabria y también ante Milena Salcedo, quien para ese momento era líder.
La destreza con la que ese día ascendió al municipio quindiano fue el mismo que mostró hace unos días en los Nacionales de ruta en Boyacá, ganando el título sub-23, y también esta semana, al hacer una fantástica presentación en el Tour de Dubái, carrera de categoría UCI 2.2, en la que alcanzó el título en la clasificación de las jóvenes con el equipo antioqueño Colnago CM.
Para Gabriel Jaime Vélez, entrenador de la oriunda de El Carmen de Viboral desde su incursión, hace dos años en el ciclismo con el equipo Avinal GW, este triunfo es un impulso anímico importante para la escuadra en su segunda carrera en Europa (debutaron el 9 de febrero en la Vuelta a la Comunidad Valenciana, en España).
“Para ella y sus compañeras es importantísimo este triunfo porque les va a dar seguridad y confianza en sí mismas para continuar con la idea de llevar el ciclismo femenino colombiano al alto rendimiento y pensar, en el futuro, en un equipo WorldTour de mujeres”, dice el entrenador.
Además del título sub-23, Daniela fue segunda en la etapa reina, que se disputó el martes, y finalizó cuarta en la general, una actuación que Vélez le atribuye al biotipo y las capacidades técnicas que la pedalista ha ido puliendo. “Es una escaladora neta, una corredora de bajo peso, liviana, y eso le permite subir muy bien”, condiciones que, respaldadas por un buen proceso, la harán brillar en la élite.