Laura Isabel Arango y su esposo Carlos Nieto Mejía son habituales corredores de las rodadas virtuales de los miércoles del Clásico EL COLOMBIANO, una competencia que dicen les gusta por su labor social y porque les ayuda a mantenerse en forma.
Claro que antes de estar en esta modalidad también lo hacían presencialmente, pues la carrera ya hace parte de sus agendas cada año, según comenta Laura Isabel.
Actualmente, de los 22 retos que se han disputado, solo se ha ausentado en cuatro debido a compromisos personales. No obstante, su hogar no ha perdido representación, pues su esposo Carlos ha estado en ellos.
“Las rutas de los miércoles me han servido demasiado para poder mantener el nivel competitivo a pesar de no estar en preparación para ninguna carrera, pero siempre es importante mantenerme activa y esta es la mejor manera que hay para ponerme retos personales y mejorar poco a poco”, dice Laura.
Además, sostiene que el nivel de la exigencia es bastante bueno y muy retador, algo que le gusta pues siempre busca estar activa y en forma.
Otro de los aspectos que resalta es que en las pruebas se encuentra con amigas y otros corredores con los que en ocasiones, antes del aislamiento por el coronavirus, rodaban por las vías del departamento. Este concepto lo comparte Paula Alzate, otra amante de las bicis que ahora combina sus entrenamientos con el equipo Colnago y los retos de EL COLOMBIANO, pues pronto tendrá la oportunidad de debutar como ciclista profesional y por eso su preparación es rigurosa.
Ellas hacen parte de esa comunidad que rueda todos los miércoles, a las 6:30 de la tarde, en una cita que las ha llevado por varios países, durante estos meses y que aún tiene muchas rutas por cumplir hasta final de año.
Por ahora, Laura seguirá fiel a la cita, siempre con el objetivo de hacer mejores tiempos, pues como en toda competencia a la que asiste busca estar en los lugares de honor, para eso se prepara.
Ayer estuvo en el recorrido del Romerman Ladenburg (Alemania), un desafío que cumplió a cabalidad .