Pese a los dos goles que recibió el Napoli, el arquero colombiano David Ospina fue uno de los jugadores más destacados del conjunto italiano en el 2-2 ante el París Saint-Germain en la tercera fecha de la fase de grupos de la Champions League.
En el duelo, correspondiente a la zona C del certamen europeo, el portero no tuvo responsabilidad en los dos goles del rival (Mario Rui en el 61’, y Ángel Di María al final en tiempo de reposición 90+3’), y por el contrario, salvó a sus compañeros de una derrota en el Parque de los Príncipes de París.
Fueron incontables las llegadas de Neymar, Kylian Mbappé, y Edinson Cavani al arco custodiado por el guardameta de la Selección, quien respondió con soberbias atajadas para cuidar el empate -los goles italianos fueron obra de Lorenzo Insigne (29’) y Dries Mertens (77’)- que mantiene al Napoli invicto con dos empates y un triunfo (0-0 con Estrella Roja y 1-0 ante Liverpool, previamente).
Con esta igualdad, el portero de 30 años firmó su mejor inicio en la competición europea: conservó su arco invicto durante 150 minutos y sólo recibió dos goles en los primeros tres juegos.
En 2014, tras su llegada al Arsenal, Ospina tuvo su primera participación en el máximo torneo de clubes del Viejo Continente. En esa ocasión recibió cuatro goles en tres compromisos; al año siguiente, en el mismo número de partidos, le anotaron ocho.
Para la temporada 2016-2017, su saldo fue de siete anotaciones encajadas luego de los tres primeros encuentros.
Napoli es segundo en la tabla de posiciones con cinco puntos, uno menos que los ingleses, líderes con seis unidades. El PSG, por su parte, es tercero con cuatro unidades.
En la próxima jornada, que se disputará el 6 de noviembre, se reeditará este compromiso en el estadio San Paolo.