Con un atípico Sevilla 2-Betis 0, con goles de Lucas Ocampo –penal– y Fernando Reges, a puerta cerrada, se reanudó este jueves la liga española de fútbol, tras el receso de tres meses causado por la pandemia.
Un minuto de silencio en homenaje a las víctimas de la covid-19 precedió al saque inicial del encuentro que abrió la 28ª jornada del campeonato, la primera de las 11 que restan hasta el final del torneo.
“Es un día realmente importante porque volvemos a estar ante un montón de aficionados de todo el mundo”, dijo el presidente de LaLiga, Javier Tebas, durante una rueda de prensa.
Las ganas de volver a jugar no esconden, no obstante que el encuentro que reactivó la tercera gran liga europea en volver tras la de Alemania y la portuguesa, regresó “en unas circunstancias que hace tres meses eran inimaginables”, según el técnico sevillista Julen Lopetegui.
El estadio Sánchez Pizjuán vacío y las estrictas medidas sanitarias que rodearon el encuentro recordaron que el derbi sevillano se iba a jugar con miedo al coronavirus, lo que no impidió que algunos aficionados se acercaran a los aledaños del estadio, pese a no poder entrar.
“Es diferente, y lo vives con pena, pero por lo demás lo sientes igual” de intensamente, dijo Laura Marín, una aficionada sevillista que se acercó con su madre, su padre, su marido y su hijo pequeño.
Laura fue una de los 200 aficionados que se acercaron a ver la llegada de los autobuses de los equipo, bajo la vigilancia de la Policía, que velo porque no se produjeran concentraciones de gente y se mantuviera la distancia.
El Sevilla respondió al favoritismo ante una apretada serie de 110 encuentros diarios hasta el 19 de julio. Hoy juegan Granada-Getafe (12:30 p.m.) y Valencia-Levante (3:00 p.m.).
