Desde que hizo historia en la élite con el FC Barcelona, tras ganarlo todo a nivel local e internacional, la carrera de Pep Guardiola en los banquillos ha sido sinónimo de exigencia y éxito.
Un legado que se extendió por el Bayern Múnich y que ahora, con el Manchester City, lo ha consolidado como uno de los entrenadores más influyentes del fútbol moderno durante los últimos 17 años.
Sin embargo, una reciente entrevista a GQ Hype, de España, reveló un giro inesperado en sus planes: un posible parón indefinido tras culminar su etapa en Inglaterra con el equipo ciudadano.
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“Voy a parar”: una decisión firme para centrarse en sí mismo
Con contrato hasta 2027, el técnico catalán confesó su intención de tomar un respiro una vez finalice su compromiso con el City, una etapa que ya es la más longeva de su trayectoria en los banquillos.
“Sé que después de esta etapa con el City voy a parar, esto seguro, está decidido, más que decidido”, sentenció Guardiola. El tiempo de este receso es una incógnita para él mismo.
“El tiempo que voy a parar no lo sé, un año, dos años, tres años, cinco, diez, quince, no lo sé. Pero sí que voy a dejarlo tras esta etapa con el City, porque necesito parar y centrarme en mí, en mi cuerpo”, detalló.
Una declaración que, sin duda, avivó el debate sobre un posible futuro en el fútbol internacional como su próximo gran desafío, es decir, tomar las riendas posiblemente de una selección nacional.
Aprendizajes y desafíos: la autocrítica en la gestión del grupo
Guardiola también se refirió a la temporada pasada, donde el Manchester City no logró los resultados esperados. Con una autocrítica certera, admitió que no ganaron en muchos meses.
“Había que haber movido más jugadores, pero es muy fácil decirlo después... Hemos estado durante muchos meses sin ganar partidos. No había pasado nunca. Pero te pone en tu sitio”, aseguró.
El técnico español reconoció haber “aprendido un poco a parar”, aunque siempre con la inquebrantable sensación de responsabilidad hacia quienes confían en él. “Tienes una responsabilidad por mucha gente que confía en ti, que te quiere: los jugadores, el presidente, el director deportivo”.
La gestión de un vestuario lleno de estrellas es otro de los puntos clave que abordó. “Tengo 23 jugadores y escojo a 11 cada tres días... Los demás sienten que no los quiero y es todo lo contrario. ¿Cómo no va a haber conflictos? Imposible”, sostuvo.
Esta reflexión resonó con la reciente necesidad del equipo citizen de renovar su plantilla, implicando la reubicación de algunos de sus pesos pesados a un papel secundario.
Lamine Yamal y el legado de Messi: una comparación prematura
Finalmente, la joven promesa del Barcelona, Lamine Yamal, también fue tema de conversación. Guardiola, con su habitual prudencia, pidió cautela ante las comparaciones con Messi.
“Hay que dejarle que haga su carrera. Ya ha hecho que lo comparen con Messi, que son palabras mayores... Y eso de comparar es una señal de que es bueno. Pero hay que dejarle hacer su carrera, y ya veremos”, concluyó.
Un mensaje que destacó la presión inherente a las nuevas figuras del fútbol y la importancia de permitir su desarrollo natural conforme avanzan los años.
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