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¿Por qué el boxeador Luis Quiñones está en coma inducido y cómo sigue su salud?
El puguilista vive desde hace más de seis años en barranquilla, ciudad en la que se estableció con el objetivo de ser profesional en el boxeo.
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El santandereano de 25 años está internado en una clínica en Barranquilla. FOTO: TOMADA DEL TWITTER DE @JulianCaperaB
27 de septiembre de 2022
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Alguna vez el boxeador Floyd Patterson le dijo al periodista estadounidense Gay Talesse que cuando un pugilista era noqueado su cuerpo experimentaba una sensación agradable, que era como si el tiempo se detuviera y flotara sobre las nubes. Pero en el caso de Luis Quiñones no fue así, pues un golpe que recibió en una pelea el pasado 24 de septiembre, lo tiene en coma inducido y luchando por su vida en la Clínica General del Norte de Barranquilla.
Todo empezó porque en la pelea entre Quiñones y José Muñoz, en la que ambos buscaban quedarse con el título nacional de peso pluma (140 libras), Quiñones fue noqueado. En apariencia todo iba normal, hasta que se dieron cuenta de que el boxeador no se pudo parar y fue necesario sacarlo del cuadrilátero en camilla.
Lo llevaron a una de las mejores clínica de Barranquilla, en la que los profesionales de la salud lo evaluaron y dieron un primer parte médico poco alentador, en el que aseguraron que tienen un deterioro neurológico producto del trauma craneoencefálico que sufrió como consecuencia de la actividad deportiva que practica.
A Quiñones lo tuvieron que operar de urgencia, ya que según información de Caracol Sports, el boxeador tenía un coágulo de sangre en la cabeza que podría poner en riesgo su vida y que fue consecuencia del fuerte golpe que padeció.
“Después de unas horas del combate, (el paciente) presenta somnolencia progresiva , obnubilación, con postura de descerebración a los estímulos centrales. En ese momento la reactividad y anatomía pupilar no son evaluables”, dice en el comunicado oficial del centro médico.
“El servicio de neurocirugía realiza craniectomía descomprensiva frontopariental izquierda, se deja bajo sedoanalgecia durante 48 hora, con medidas antiedema cerebral y neuroprotección plena”, agrega la institución que lo está atendiendo, lo que quiere decir que Quiñones está en estado de coma inducido luego de que le realizaran dicho procedimiento.
La clínica confirmó el “pronóstico muy reservado para la vida del paciente y la función con alta morbimortalidad, lo cual se ha informado ampliamente a sus familiares”, concluye el comunicado médico.
De momento el deportista sigue luchando por su vida en la Unidad de Cuidados Intensivos del centro asistencial al que fue llevado, y aunque los partes médicos no son alentadores, se espera que tenga pronta y buena recuperación.
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