AMike Yastrzemski le preguntaron, al término del juego que Gigantes le ganara 7-6 a los Dodgers, su opinión por la excelsa temporada que cumple su compañero colombiano Donovan Solano y el fortachón beisbolista de 29 años que se desempeña como jardinero izquierdo en la escuadra de San Francisco no vaciló en decir: “es uno de los mejores bateadores que he visto”.
Pues con este pelotero, nieto de una de las leyendas del béisbol organizado (Carl Yastrzemski, quien jugó 22 años para los Medias Rojas de Boston y fue triple campeón de bateo entre 1961 y 1983), Solano disputa el liderato ofensivo de los Gigantes, logro que se da merced a que es el más constante de la escuadra hoy.
Pero algo más: del dugout (camerino) gigante salió una simpática versión que hace juego con el nombre del barranquillero de 32 años y que tiene que ver con su nuevo apodo: “Donnie Barrels” (algo así como Donnie Barriles, traduciéndolo al español). Y la razón es sencilla: debido a su tendencia a golpear todo lanzamiento en el punto óptimo.
“Siempre encuentra el barril, golpea la pelota con fuerza y de forma inaudita cuando se piensa que no lo hará”, apuntó Yas.
Y este enfoque es verdadero si se tiene en cuenta la labor que cumple el utility (puede jugar distintas posiciones del campo), en un año que parece consagratorio después de seis campañas, y más aún cuando solo ha tenido presencia inicialista en cuatro de los seis compromisos disputados hasta ayer por su novena.
En su más reciente encuentro, que concluyó ayer de madrugada, Donovan conectó tres dobles, un elevado de sacrificio, anotó una carrera e impulsó 3 en la derrota en diez entradas 12-7 con los Padres, tercer choque de la serie entre ambos.
Según detalla el portal de la franquicia gigante, Solano suma 20 veces al bate, 10 hits, 3 carreras, 4 dobles, un jonrón, 9 empujadas y promedio de .500 igualado con Austin Slater como mejores bateadores del equipo.
A ello se suma estos datos que no son poca cosa para un colombiano en Grandes Ligas: el que más carreras ha impulsado (9), más dobles tiene (4), uno de los cuatro jugadores de Gigantes que ha pegado cuadrangulares, y solo superado por la figura de la escuadra (Yastzzemskial) como máximo chocador de pelota (10 hits contra 11 de este).
Mejor dicho, y guardando distancias con el fútbol, hoy Solano sería como ese volante que quita balones, arma y hasta hace goles (de todo tipo) en un equipo de fútbol.
“Tiene un movimiento muy lento en el plato, realmente cree en sí mismo”, apuntó el manager del equipo, Gabe Kapler, en declaraciones al portal.
“Afortunadamente tengo un golpe corto y pude hacer algo de daño”, advierte el jugador que en 2012 se convirtiera en el grandesligas número 12 de Colombia. Hoy la historia patria en las Mayores suma 24. Por lo pronto está bien prendido al bate.
