La expectativa que creó la noticia de la ampliación a doble calzada de la paralela al Río Medellín entre Solla y Tricentenario ha generado diferentes sentimientos entre la comunidad de influencia del proyecto.
El primero fue de preocupación, especialmente entre los habitantes de las casas del costado oriental de la vía, porque creían que se iban a tener que ir.
"Estaban diciendo que nos iban a reubicar y por eso estábamos muy aburridos porque nos íbamos a tener que ir del barrio en el que llevamos casi 20 años", expresó Jader Iván Sambony, quien vive con sus padres.
Sin embargo, desde la semana pasada ya se sienten más tranquilos porque el alcalde de Medellín, Alonso Salazar, estuvo la semana pasada en el sector reunido con sus habitantes. "Nos dijo que nuestras casas por lo menos hasta el 2012 no las iban a tocar", afirmó Jader.
Según el secretario de Obras Públicas de Medellín, Mauricio Valencia, esta es una primera etapa en la que se trata de minimizar al máximo el impacto social en el tema de adquisición de predios.
"La intervención definitiva del corredor vial del Río, que se piensa entregar en concesión y que integraría la Paralela, es mucho más radical y requiere de un proceso social más amplio a través de un operador, pero que se hará en una segunda etapa", explicó Valencia.
Por ahora la afectación, mucho menor, es en el costado occidental, entre 80 y 100 predios, de los cuales algunos ya se han comprado y por eso ya se ven algunas casas desocupadas.
Pero también familias que habitan algunas de estas casas en calidad de inquilinos ya padecen las consecuencias.
"A nosotros todavía no nos han dicho nada, pero sabemos que ya están negociando con el dueño de la casa y que nos vamos a tener que ir, pero lo difícil será encontrar para dónde, porque los arrendamientos están muy caros", comentó Fabio Aristizábal, quien vive con sus dos hijos y esposa en la parte baja de Toscana.
En otro sector, en la urbanización Plaza Colón, Gladys Uribe, está tranquila porque dice que si se tiene que ir, se va, porque incluso quiere vender.
"Pero lo malo es que no nos han dicho nada. Todo es rumores. Que se llevan parte, que se llevan dos bloques y lo demás...", cuenta Gladys.
Sin embargo, se siente perjudicada porque ya perdió un negocio. "Un señor que ya negoció en Toscana me iba a comprar, pero con tanto rumor se quitó", anotó Gladys.
Al respecto, el secretario de Obras Públicas aseguró que este complejo urbanístico no será tocado. Además aclaró que el proceso de adquisición de predios que se adelanta en el momento es solo con aquellos que se sabe que van a ser afectados en su totalidad.
"Con los que se van a intervenir por fajas debemos esperar a que nos entreguen los diseños definitivos para saber exactamente cuánto es lo que se afecta", explicó Valencia.
Urgente
Lo que sí se percibe es la necesidad urgente de la obra, la cual se desnudó aún más con el problema que se generó en la autopista Norte que obligó a desviar todo el tránsito pesado hacia la paralela y otros vehículos livianos buscar salida por ésta por la lentitud del tránsito por la Autopista.
Además, por el peligro que a diario viven los habitantes de la zona de influencia de la paralela que deben compartir la vía con los vehículos por la falta de andenes.
Para Valencia este es uno de los primeros proyectos importantes y emblemáticos de la Administración que hace énfasis en la integración regional. "Esperamos que nos entreguen los estudios y diseños a principios del año entrante para iniciar obras en el primer trimestre", señaló Valencia.
Concluyó que la administración está haciendo un gran esfuerzo para iniciarlas lo más pronto posible y en ese sentido anticipó la compra de predios y la adjudicación de los diseños.
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