La tuberculosis sigue viva, presente y riesgosa. Lo que algunos consideran una enfermedad a punto de desaparecer ignoran que, cada año, se reportan solo en Antioquia más de mil casos de ésta en su condición de pulmonar.
Así lo señalan las estadísticas de la Dirección Seccional de Salud de Antioquia (DSSA).
Y, aunque los datos doblan a los publicados por el Sistema de Vigilancia en Salud Pública del Instituto Nacional de Salud, lo cierto del caso es que se trata de una enfermedad frente a la que no se puede bajar la guardia.
La neumóloga Ana Catalina Vanegas, jefa de la Unidad de Neumología del San Vicente de Paúl, señala que hay dos condiciones que pueden aumentar el número de personas diagnosticadas.
La primera es la de los pacientes con VIH, pues como son inmunodeprimidos, se contagian con mayor facilidad. La segunda condición tiene que ver con problemas de alimentación.
"Las condiciones nutricionales de la gente pueden afectar las defensas. También el hacinamiento y la situación en que se vive en barios barrios de la ciudad", opina la neumóloga.
Por su parte, la médica de la Clínica Bolivariana Luz Marina Peláez, especialista en el tema de VIH y conocedora de la problemática de tuberculosis en la ciudad, señala que en Medellín el numero de casos es estable.
"Si se presenta un aumento en las estadísticas es porque se han dispuesto mecanismos para lograr un mayor diagnóstico y, de paso, mejor control de la enfermedad", dice.
Altamente contagiosa
La tuberculosis es una enfermedad causada por una bacteria conocida como Mycobacterium tuberculosis.
Su posibilidad de contagio es muy alta, tanto que, según Luz Marina, una tercera parte de la población puede estar infectada, pero eso no significa que todos desarrollen la enfermedad.
"Las condiciones de salud de las personas, su alimentación, su estado general de vida, condicionan la posibilidad de enfermarse o no", indica la médica.
La bacteria viaja en la saliva, en micropartículas y queda en el aire por largos periodos. Se pueden expulsar al toser, pero también al reír o, simplemente, al hablar.
"Sería importante que, quienes ya han sido diagnosticados, usen tapabocas, para evitar contagiar a más personas", aconseja la neumóloga Vanegas.
Se trata, sin embargo, de una enfermedad que tiene tratamiento y que se cura, pero entre más tiempo se demore el diagnóstico, mayor riesgo para los demás.
Advierten las especialistas que el tratamiento para esta enfermedad es largo y que requiere del compromiso de los pacientes.
"Algunos, apenas se sienten bien, lo abandonan, lo que hace que los medicamentos ya no funcionen y aparece la tuberculosis multirresistentes", explica Vanegas.
Según Peláez, entre un 8 y un 10 por ciento de quienes han sido diagnosticados abandonan el tratamiento en algún momento.
"Hay que advertirle a las personas que se pueden morir por abandonar la medicación", advierte.
¿Cómo prevenir la tuberculosis? Una buena alimentación, condiciones de vida saludables, ejercicio y evitar fumar son las recomendaciones.
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