Era impresionante: la fila de binomios no terminaba. Se alzaba la mirada por encima de los demás y no se veía un final.
Montando un hermoso Gipsy Vanner, iba Julián Vélez. Contento, mientras los amigos lo rodeaban para animarlo para la entrevista.
"Muy alegre en la cabalgata, me vine con los amigos que le gustan los caballos. Veo que hay más gente que el año pasado y me parece muy bueno, porque para mí este es el mejor evento de la Feria", dijo.
El sol calentó los ánimos y los subió. A un lado de la avenida regional iba adornado con un sombrero puntudo, como mexicano, Edgar Serna, comerciante que se vino desde Cali para disfrutar de esta versión del desfile a caballo.
"El sombrero lo traje desde Neiva, donde me llamó mucho la atención. Y me lo puse para este evento porque es algo muy especial que se vive cada año", dijo.
Bendita mujer
Un factor común era la música de Vicente Fernández. En una tarima pequeña, un hombre vestido de mariachi, a quien se conoce con el nombre artístico de 'el Zagal', le daba el saludo de bienvenida a los binomios con las canciones del mexicano.
Por supuesto no podían faltar las mujeres. Rodeada de sus amigas, Paula Ramírez disfrutaba de su primera cabalgata.
"Un poquito nerviosa porque es la primera vez que estoy en este evento, pero muy contenta de estar con mis amigas y disfrutando de la Feria", dijo.
Más adelante, Ana Gabriela Tamayo. Tiene siete años y ayer estaba vestida como la mejor chalán para este desfile. A su lado sus tías le daban ánimos mientras el caballo avanzaba con tranquilidad.
"Estoy muy contenta de estar en la cabalgata, porque me gustan muchos los caballos. Aunque tengo susto porque muy pocas veces he montado en ellos", explicó.
La fila de caballos y jinetes se prolongó durante toda la tarde. Nadie se quería ir, tal vez porque hace mucho rato que no se juntaban el sol y la fiesta en Medellín.
Pico y Placa Medellín
viernes
3 y 4
3 y 4
