Los habitantes del barrio La Cumbre, de Manizales, no sienten el agua por sus cuerpos desde hace 16 días. Un daño de una conducción en el sector El Popal, en la vía a la bocatoma de Olivares, los dejó sin el suministro dos días antes de la emergencia que vive la ciudad por una avalancha que afectó la planta Luis Prieto y dañó dos tuberías de 28 y 30 pulgadas. Esta última se instaló el pasado fin de semana mientras que la otra falta por adecuar.
Desde que comenzó el agite por el agua, Octavio Londoño se levanta a las 5:00 de la mañana para coger turno en un nacimiento del barrio. Se queja porque ya siente en sus manos el trajín de cargar baldes durante estos días.
"Los carros tanque vienen con poca frecuencia, entonces toca buscar el agua en otros lados. La gente se amanece en el nacimiento por el sufrimiento que tenemos", dice Octavio.
Mónica Muñoz es otra de las perjudicadas y en tono jocoso dice que cada que hay un daño en la ciudad, La Cumbre es el primer barrio damnificado por el suministro del líquido. La señora que va a completar 12 años en el lugar se abastece con agua de los vehículos y con la que trae un vecino de Villamaría.
Según Sebastián Henao, Subgerente Técnico de Aguas de Manizales, el daño en la bocatoma de Olivares se superó y esperan que en las próximas horas el barrio se beneficie parcialmente con agua del acueducto.
Molestias
El inconformismo de algunos manizaleños porque a sus casas no ha llegado el líquido por el acueducto sigue siendo la constante. Los ciudadanos critican la posición de la Alcaldía, según la cual, la mayoría de barrios han tenido agua por algunas horas. Este martes, habitantes del barrio Altos de Granada se comunicaron con La Patria porque si bien han tenido agua algunos días, el robo de contadores hace que el líquido se pierda por las calles.