El gigante noruego Thor Hushovd, del Cervelo, se llevó la victoria olímpica de la cima de Montjuic en un pulso con Óscar Freire, al que batió con claridad en los últimos metros de la sexta etapa del Tour, la primera ciento por ciento española con el trayecto entre Girona y Barcelona, de 181 kilómetros, en la que el suizo Cancellara retuvo la camiseta amarilla.
Hushovd, un ex esquiador de fondo y aficionado a la caza, de 31 años, corpulento como pocos, 1,84 metros y 83 kilos, superó a Freire a tan solo diez metros de la línea, cuando el cántabro rozaba el sueño de ganar en la Ciudad Condal, que recibía el Tour por tercera vez. La tercera casilla se la apuntó José Joaquín Rojas, otro de los murcianos del Caisse D'Epargne.
Así fue el desenlace de una jornada difícil por el agua que cayó sobre Barcelona y marcada por las caídas en el tramo final. La víspera a la cita inaugural de la montaña, que los favoritos pasaron con tensión, pero sin cambios en la general. El suizo Cancellara logró su objetivo de llegar de amarillo a Andorra, pero ahí se hará la última foto con la prenda dorada. "Mañana (hoy) se habrá terminado todo", admitió. Pero nadie le quitará una semana de amarillo.
Duelo cerrado
Lance Armstrong y Alberto Contador se mantuvieron en los dos siguientes escalones del podio, el texano con el mismo tiempo de Cancellara (22 centésimas de diferencia), y el madrileño a 19 segundos. Ambos llegaron en el grupo principal, atentos en la subida a Montjuic, con el tiempo del ganador, 4:21.33.
El pelotón enfiló rumbo a la Costa Brava con la cabeza puesta en la llegada inminente de la montaña. En el guión estaba marcado un día de transición, de esos que sirven para guardar fuerzas. Luego la lluvia, la tensión y las caídas volvieron a complicar el escenario previsto.
El escocés David Millar, un rodador de postín, apostó por la aventura en solitario a 29 kilómetros de meta. Como en sus mejores contrarreloj en el Tour, antes de cumplir su castigo de dos años por dopaje, desafió a un pelotón que circulaba veloz en Barcelona, donde el ambiente ayudó a contagiar los ánimos de los corredores.
Llegó el momento de optar al premio. Esta vez el Columbia no dispuso de efectivos ni de terreno propicio para preparar la fiesta a Cavendish. Saltó Freire desde atrás, agarró unos metros, el sueño se acercaba, pero apareció la fuerza bruta de un nórdico llamado Thor Hushovd para regalar al Cervélo de Carlos Sastre su primera victoria en el Tour.
Antesala de la montaña, con brillante papel del colombiano Rigoberto Urán que aguantó la rueda, para llegar con los del lote de punta y ponerse quinto entre los jóvenes, mientras atrás Leonardo Duque se caía en medio del piso liso y mojado. Hoy es otra fiesta.
Pico y Placa Medellín
viernes
0 y 6
0 y 6