En campaña, Aníbal Gaviria, alcalde de Medellín, se comprometió a crear 100.000 empleos nuevos, un anuncio pomposo para una ciudad con un indicador de desempleo del 13,3 por ciento, muy por encima del promedio nacional, que es del 10%, según cifras del Dane.
Tomás Mejía , subdirector de Prospectiva de Ciudad, la dependencia que en la Alcaldía ejecuta las estrategias de empleo, aclara que no es fácil bajar el porcentaje negativo, pues la solución no depende sólo de la Administración.
Menciona aspectos como la llegada de desplazados, la tasa de cambio y la política exterior del país, que inciden de manera directa en el crecimiento empresarial y, por ende, en el aumento o la pérdida de puestos de trabajo.
Tras diez meses de gobierno, muchas políticas apenas se ponen en marcha y aún no hay cifras que refrenden si se va o no por buen camino.
Despegue de obras
"Medellín es polo de atracción y cada día llegan familias y se asientan en las laderas y empiezan a disfrutar de todos los programas de Bienestar Social, de Familias en Acción y demás", comentó Mejía. Es decir, se crean puestos, pero llegan más desempleados cada día.
La tasa de cambio desfavorable y la crisis comercial con Venezuela han tenido impactos negativos y la recuperación no ha sido al ritmo esperado, sugiere Mejía. Pero menciona que con una productividad operativa, la ciudad clúster, la formalización y el acceso a más mercados, se busca generar impactos a favor del empleo.
El Alcalde, Aníbal Gaviria, indica que en el segundo año de su mandato, cuando despeguen las grandes obras de infraestructura, seguramente se generarán puestos.
Con el programa de modernización de la Alcaldía, la creación de condiciones adecuadas para la inversión extranjera y el acuerdo por el trabajo decente y la productividad, se aspira "avanzar en el propósito de generar empleos y también que se conserven los existentes", precisó al alcalde.
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