Antioquia, tierra de contrastes, tiene también en el tema de la gestión fiscal una gran dicotomía pues si bien su capital Medellín es el municipio con mejor desempeño, el Departamento ocupa el puesto 19, en lo que respecta al promedio obtenido por los 125 municipios que lo integran.
Sin embargo, según el último informe de Planeación Nacional (DNP), en el Índice de Desempeño Fiscal con respecto a 2012 (o sea en la propia gestión de las finanzas del Departamento), Antioquia mejoró dos puestos al pasar del 16 al 14.
En los años 2009 y 2010, Antioquia estaba en los primeros lugares en este Índice de Desempeño Fiscal y en los años siguientes descendió a lugares intermedios, en parte por un cambio en la metodología de evaluación. De hecho, en el año 2010 cuando se cambió la medición pasó del puesto 2 al 12.
Antioquia es el departamento con el mayor volumen de ingresos tributarios propios, pero cuando se miden esos ingresos tributarios sobre el total de ingresos, que fue el cambio que se hizo en la medición, Antioquia resulta afectada pese a generar resultados que le permiten sostener su solidez financiera. De hecho, de los 13 departamentos que anteceden al departamento en la calificación, hay cinco en Ley 550.
En lo que tiene que ver con el Índice de Desempeño Integral, que mide múltiples variables de todos los municipios, Antioquia está en el puesto 19 entre 32 departamentos, con 64,3 puntos en una tabla en la que el primer departamento es Cundinamarca, con 80,1.
Este índice integral sitúa al promedio de los 125 municipios de Antioquia en un nivel de satisfactorio, entre 70 y 80 puntos, pero buena parte de los indicadores, con excepción en algunos municipios, han caído.
Por eso es preciso que las alcaldías introduzcan correctivos para hacer más eficiente el recaudo de impuestos y adopten estrictos programas de reducción de gastos mediante buenas prácticas administrativas.
El informe de Planeación Nacional, con corte a septiembre, sirve de alerta para mejorar sus índices de aquí al 31 de diciembre, en lo que tiene que ver, según el DNP, con programas de reestructuración de la deuda, saneamiento de pasivos y fortalecimiento de ingresos.
Si bien tenemos el primer municipio del país con el mejor desempeño en la gestión fiscal integral que es Medellín, con una calificación de 92,45 puntos sobre 100 (en 2012 ocupaba el puesto 65, con 80,7 puntos), a Bello que se ubica en el rango de sobresalientes y sin olvidar a Rionegro que en 2013 brilló como el primero en gestión fiscal, existen otros municipios antioqueños en una posición muy baja.
De ahí la importancia del acompañamiento de la Gobernación a cada administración en programas de saneamiento fiscal y financiero, lo que en ocasiones implica realizar ajustes mediante una reestructuración administrativa.
Las contralorías están llamados a contribuir a esta buena gestión, al igual que la comunidad que debe exigir un sano manejo de las finanzas públicas de manera que los municipios cuenten con la solidez necesaria para cumplir sus metas en materia de educación, salud, obras públicas, agua potable y saneamiento básico.
Es algo que debe exigirse desde el momento mismo en que elegimos a nuestros gobernantes y estos presentan sus planes de desarrollo.
Según Planeación Nacional una tercera parte de los 1.102 municipios en Colombia (320) están en deuda con sus habitantes porque bajaron sus niveles de gestión y esto implica graves dificultades para la ejecución de obras prioritarias que contribuyan a dignificar la calidad de vida de la población.
Estamos trabajando de la mano de los municipios para su sostenibilidad fiscal
Por María Eugenia Ramos
Secretaria de Planeación del Departamento de Antioquia
Lo que hemos tratado en la Gobernación desde que empezamos nuestra gestión en el año 2012 es un acompañamiento con fortalecimiento institucional de 70 de los 125 municipios de Antioquia, para que tengan un desempeño relevante en la gestión fiscal.
Es decir que puedan mejorar el recaudo de los recursos propios, en especial, Predial e Industria y Comercio y, fundamentalmente, mejorar sus procesos internos de facturación y cobro.
Podemos decir que en el tema del Indicador de la Ley 617 empezamos con 26 municpios que no se ajustaban a la norma y este año solamente uno incumplió.
Nos falta mucho por hacer y no vamos a desistir en el empeño. Por eso seguimos trabajando con nuestros municipios para mejorar su sostenibilidad fiscal y financiera, para que esto les permita tener más recursos e invertir más en sus comunidades ejecutando en forma completa sus planes de desarrollo.
Independientemente de los ajustes que se están haciendo en la metodología del Indice de Desempeño Integral, en el cual Antioquia está en el puesto 19 (hablando del desempeño promedio de los 125 municpios de Antioquia), los resultados nos ponen en el reto de trabajar de la mano de los municipios y mirar qué ha pasado.