"Dígale a esa gonorrea hijueputa de William Garcés que le damos hasta el viernes para que se vaya. Que si no se abre, lo quebramos".
La sentencia la profirió un hombre que llamó a la portería del colegio San Juan Bautista de La Salle, en Manrique Oriental, el martes a las 7:40 a.m.
Después de siete meses de trabajo, el profesor William Garcés Sierra se alista para dejar el colegio.
Cree que la amenaza se debe a su trabajo en la Cápsula del tiempo, un proyecto que ha desarrollado desde hace 13 años en varias instituciones.
A sus estudiantes y colegas les propone que plasmen sus sueños en una autobiografía con fechas definidas, para que, llegado el momento, revisen si los cumplieron.
En Manrique busca que sus alumnos no caigan en la violencia. Cada joven, desde 6º hasta 11º, pintó sus aspiraciones en un trozo de tela. Luego juntaron los retazos en la 'colcha de los sueños'.
"Estábamos preparando la Bendición de los sueños con el padre Nevardo Cataño y queríamos hacer una marcha por La Alpujarra", comenta.
Dolor es lo que sienten sus muchachos con su posible partida. Farley Macías, de 9º, quiere ser un empresario exitoso y así lo consignó en la colcha. "Él nos insiste en las metas que debemos tener en la vida y es el guía para alcanzarlas".
Darío Rodríguez, rector de la Institución, también destaca el trabajo del profe: "Estaba cambiando los imaginarios de los muchachos. Antes de que llegara querían ser los 'duros' de la zona. Ya saben que se puede soñar con ser mejores personas".
Garcés acudió a la Secretaría de Educación y hoy estará en Fiscalía y Personería en busca de alternativas, porque mañana se cumple el plazo que le puso esa voz anónima.
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