El nuevo movimiento político encabezado por el expresidente Álvaro Uribe además de haber tenido un amplio impacto en medios de comunicación, ha generado una desestabilización en el mapa político nacional. Con el Puro Centro, como se le ha denominado, entra a jugar un nuevo actor de la política nacional en la carrera por el manejo del poder.
El Puro Centro tiene tres grandes retos que debe sortear con inteligencia y estrategia para fortalecerse en el tiempo anterior a las campañas políticas que empezarán a sentirse el próximo año para Congreso y posteriormente para la Presidencia de la República.
Estos tres retos son: convertirse en un movimiento propositivo y no exclusivamente de control y oposición al gobierno, luego, consolidarse como una opción de poder alternativo con nuevos líderes y finalmente, elegir a un candidato robusto y llamativo que pueda hacer frente a una eventual campaña reeleccionista del Presidente Santos. Hablemos un poco de cada uno de ellos.
Primero: Es claro que Puro Centro nace como un movimiento de oposición al gobierno y en buena parte también a un amplio sector del Partido de la U. El discurso duro contra el gobierno y su falta de lealtad con las banderas del gobierno pasado, ganará adeptos hasta un momento determinado, después de esto habrá que proponer y presentar políticas e ideas innovadoras que diferencien a este movimiento y sus candidatos del gobierno nacional. Habrá que proponer y diseñar políticas llamativas para la opinión pública, de la misma manera como el entonces candidato Álvaro Uribe lo hizo en su primera campaña presidencial. Ahora es el momento de la crítica y la oposición, llegará el de las propuestas e ideas.
Segundo: En medio de un nuevo escándalo político ocasionado por la reforma a la justicia, se ha generado nuevamente un amplísimo descontento nacional con los partidos políticos y los congresistas colombianos en general. El Puro Centro tiene una opción de oro para sacar nuevos candidatos a Cámara y Congreso, que rompan con los moldes tradicionales de la política, tanto por su formación académica y personal, como por su estilo y manera de hacer la política. Esta crisis es una oportunidad para que se lancen al ruedo nuevas caras políticas que oxigenen y devuelvan algo de la perdida confianza en el Legislativo.
Tercero: Además de las propuestas y la elección de nuevos líderes políticos para Congreso, el Puro Centro debe elegir un candidato que tenga vocación y posibilidad de ganar la presidencia de Colombia. Infortunadamente las campañas no sólo se ganan con buenas ideas y personas altamente preparadas en lo técnico, sino con personalidades llamativas y cautivadoras. El talante y estilo serán fundamentales para enfrentar al poco carismático candidato-Presidente Santos.
Las condiciones son favorables para el Puro Centro y los retos son de amplio calado. Las fichas del ajedrez apenas se están acomodando para empezar una batalla política que promete y definirá nuevamente un modelo político que regirá el destino de Colombia.
@FedericoHoyos
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