"Sebastián", uno de los más sanguinarios carceleros de las Farc, según el testimonio de quienes han sido sus víctimas, cayó en poder del Ejército en el sur del Chocó.
Una buena noticia, pues su captura permitirá esclarecer crímenes como el del gobernador de Antioquia, Guillermo Gaviria Correa, de su asesor de paz, el exministro Gilberto Echeverri Mejía, y de ocho militares. Él habría sido el directo responsable de la masacre perpetrada en Urrao, en 2003, siguiendo instrucciones de alias "el Paisa".
El excongresista Óscar Tulio Lizcano, describe en su libro Años en silencio , los martirios físicos y psicológicos a que fue sometido por este desalmado jefe subversivo, que se sentía perseguido hasta por su propia sombra. Su captura es un respiro para la martirizada región del Chocó.
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