Para el comandante de la Policía Metropolitana, general Dagoberto García Cáceres, estar atento a la logística de la seguridad de la Asamblea del Banco Interamericano de Desarrollo (BID) no le implica el abandono de la tranquilidad del resto del Valle de Aburrá, así su jornada de trabajo esté bordeando las 24 horas.
Por eso, por estos días, a este oficial de la Policía, oriundo de Durania, Norte de Santander, y experto piloto de helicópteros, no es difícil verlo asistiendo a uno de los encuentros con los delegados del BID y los invitados nacionales e internacionales, como encontrarlo en la madrugada con sus hombres, asumiendo el control de las zonas periféricas de Medellín.
Aunque esos trasnochos le ocasionaron un resfriado, que obligó a que lo asistiera un médico en su propio despacho, el general García, con buen humor y documentos, respondió a una serie de inquietudes sobre la seguridad de la Asamblea del BID.
La Asamblea obliga a concentrar esfuerzos en su normal desarrollo, mientras tanto ¿qué pasa con el resto del Valle de Aburrá?
"Una vez se diseñó el Plan Estratégico Integral de Seguridad para la ciudad se buscó que los servicios rutinarios de vigilancia que cubren las 26 estaciones no se afectaran. Los comandantes siguen cumpliendo sus labores al mando del jefe Operativo, coronel Carlos García, sin ninguna injerencia con el servicio principal del BID. Para atender la Asamblea se acudió a la Dirección de la Policía que nos hizo un apoyo importante de 2.790 hombres de todas las especialidades de la institución. No hay ninguna afectación al servicio tradicional de Policía".
En la Asamblea se ve todo un despliegue tecnológico en seguridad ¿cuáles destaca?
"Hay un esfuerzo mayor porque el plan es integral. Primero recuperamos el sistema de vigilancia por cámaras, en todo lo que tiene que ver con el Centro de Convenciones. También se hizo una alianza con EPM para que nos ayudara a montar el Puesto de Mando Unificado y nos cedieron la Sala de Crisis que ellos tienen. Con Metroseguridad se logró que todas las cámaras de la ciudad tuvieran un monitoreo constante desde allí, al igual que las del Tránsito. Las cámaras que tiene EPM al rededor del Centro de Convenciones son última generación y alta resolución, fáciles de monitorear y dejan ver las evidencias en caso de una investigación". También se coordinan los 32 puestos de control con los que se blindó la ciudad para hacer plan candado en caso de necesitar hacer cierres. Avantel nos facilitó su servicio para tener comunicados a los 2.790 hombres que trabajan en la seguridad de Asamblea y nos permitió conectarnos con la base de datos de la Dijín en Bogotá y utilizar unos lectores biométricos de huellas. Los grupos especiales, como el Gaula, Antiexplosivos, Dijín y Guías Caninos, entre otros, trajeron sus propios equipos".
¿Y patrullas especiales?
"Tenemos una patrulla inteligente dotada con equipos para identificación de personas, grabaciones, radares y elementos que nos garantizan la conexión con la base de datos de Bogotá por Internet y Avantel.
¿Esta seguridad se va a mantener después de la Asamblea?
"Algunos policías regresarán a sus departamentos y otros a las escuelas porque son oficiales de altos estudios. Pero, a solicitud del Presidente y del alcalde de Medellín, está previsto que cuando se gradúen nuevos patrulleros, en mayo o junio, se aumentará el pie de fuerza porque esta sensación de seguridad que ganamos no se puede acabar".
¿Hay personajes que requieren más seguridad que otros?
"Es política del BID darle trato igual a todo el equipo de trabajo, gobernadores y presidentes de bancos. En el caso del ex presidente Bill Clinton se acordó con el Departamento de Estado y la Embajada de E.U. en Bogotá para hacer las coordinaciones de una seguridad especial".
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