Como el famoso Álgebra de Baldor, la tabla periódica puede resultar en la pesadilla de muchos estudiantes que finalizan su bachillerato, o en todo un descreste.
Sandra Mesa, Alejandra Tangarife y Claudia Bedoya de 11 en el Marco Fidel Suárez de Bello, son de las que no les gusta el tema. Sin embargo, de tanto usarla en las clases de Química ya se saben de memoria elementos como el hidrógeno, potasio, magnesio, azufre y litio.
La poderosa herramienta de estudio está de cumpleaños. El 6 de marzo se cumplieron 140 años de haber sido ordenados, por el químico ruso Dmitri Ivánovich Mendeléiev, los 64 elementos conocidos entonces, tras descubrir la ley periódica.
Aunque Julius Lothar von Meyer publicó otra, no tuvo tanto realce.
Evelyn Trujillo es de las que disfruta al máximo sus tres horas semanales de la asignatura en la institución educativa José Manuel Restrepo. Para la joven, de 17 años, nuestra existencia se debe a la química. Hasta en el amor existe, afirma para dejar claros sus argumentos.
En su futuro la estudiante de once, no se ve en una oficina frente a un computador sino dentro de un laboratorio innovando e investigando. Por eso su voluntad es estudiar Química en la Universidad de Antioquia.
"En la de Antioquia están los más tesos y salen los mejores", afirmó.
El virus del sida es un tema que inquieta a la bachiller quien en su colegio realiza la media técnica en Química de procesos textiles. Junto con sus compañeros realizó un proyecto investigativo de las normas de seguridad que se deben tener en un laboratorio para evitar accidentes o qué hacer en una emergencia.
Jorge Iván Lezcano es el profe de Química del Jomar. El docente, licenciado en Biología y Química de la de Antioquia, es una apasionado por la materia y ese sentimiento lo trata de transmitir a sus alumnos.
Todo lo que está a nuestro alrededor no es tan abstracto. Los jóvenes deben aprender a reconocer la importancia de la química y a quererla. El oxígeno que respiran es esencial; la cocina es un laboratorio de química. Así, todo lo que percibimos a nuestro alrededor es química, explicó.
En la tabla periódica está el compendio de las propiedades físico-químicas de los elementos químicos, es decir es la forma de dar a conocer de qué está hecha la materia, aclara en términos más comprensibles para los estudiantes.
Durante el último mes y para que los estudiantes se familiaricen con los elementos de la tabla periódica, en las clases y en las tardes los jóvenes han elaborado una tabla en icopor que pronto pegarán en uno de los paredones de 11-5, el salón de Evelyn.
No es un capricho del profesor. Para Jorge, así como la herramienta de trabajo diaria para un cirujano es el bisturí, para un químico es la tabla periódica. El docente, por esta razón, no ve problema en que los estudiantes saquen la tabla en los exámenes o que la peguen grande sobre la pared.
Luz María Atehortúa es docente en el San José de Las Vegas en donde desde primero de primaria se contemplan temas de química.
Como profesora de la asignatura de noveno a once considera también que el aprendizaje de la tabla no se debe imponer de memoria.
Las jóvenes deben saber usarla conociendo ciertas generalidades y con la práctica poco a poco irse despegando de la tabla, manifestó.
En la universidad a la que aspira pasar Evelyn hicieron una actividad similar para conmemorar los 140 años. De acuerdo con Pedro Nel Araque, del Instituto de Química de la U. de A., más de 120 estudiantes trabajaron, cada uno en un elemento, en la construcción de una tabla visible y representativa construida en cajas de cartón, que se exhibió en la U.
Es que, sostiene, para los estudiantes, la tabla es el pilar fundamental para entender el comportamiento químico de las sustancias.
Alcalinos, térreos, gases nobles...
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