Natalia Jerez sorprendió a los televidentes con su papel en la telenovela "Juegos Prohibidos", pero más con la serenidad y madurez con la que tomó el éxito y reconocimiento que logró.
Antes de aprovecharse de ello y aceptar una de las propuestas que le hicieron para protagonizar rápidamente una telenovela, empacó sus maletas y se radicó en Argentina para prepararse en la actuación.
Para muchos sería una locura, pero no para Natalia, quien a sus 24 años de edad ha demostrado serenidad y temperamento, pero en especial sabe bien qué es lo que quiere en la vida, actuar, "pero haciéndolo bien", aclara.
Este año volvió al formato de la telenovela, en un papel de reparto en Los Protegidos, ahora como Verónica Santana.
"Estaba esperando un proyecto así, un personaje como Verónica, donde pudiera demostrarme a mí misma, y al público, que podía hacer un personaje completamente diferente a Luisa Mattos (Juegos Prohibidos), por eso no tuve problemas en prepararlo, hacer el casting y ganarme el personaje", comenta Natalia Jerez, graduada como comunicadora social, pero ahora dedicada de lleno a la actuación.
Confiesa que en Argentina nació un nuevo amor, el teatro. No conocía este arte dramático, pero una vez pudo probarse en el mundo de las tablas, no duda en afirmar que le encantaría convertirse en toda una actriz de teatro, aunque reconoce que trabajar en televisión es necesario.
"Son lenguajes distintos, pero en teatro lo vives y lo sientes de corrido, no hay tiempo para desconcentrarse, casi no puedes parpadear. Es adrenalina pura".
Pero con "Los Protegidos" está feliz con el equipo de trabajo y con la acogida que ha obtenido dentro de los televidentes. "Ha sido mágico ver cómo mi personaje salió una noche y a la mañana siguiente la gente en la calle ya me decía Verónica Santana", comenta Natalia Jerez.
El año pasado, tras su regreso de Argentina, continuó sus estudios de teatro y sólo en televisión realizó algunos capítulos de series como "Mujeres asesinas" y "Sin Retorno".
"Es parte del ejercicio de un actor, preparar un personaje, llevarlo dentro de sí durante una semana y luego despojarse de él. Creo que son formas que le van bien a la actuación".
Y agrega: "No tengo afán alguno en la actuación, estoy dando mis primeros pasos en ella, pero quiero darlos bien dados, pues es una carrera extensa, feliz, en la cual nunca terminas de aprender".
Cuando se le pregunta por Verónica Santana, la emoción se le nota en el tono de voz: "es una abogada justiciera, que está dispuesta a pelear por las injusticias e incluso lo hace contra su padre, siempre de la mejor manera, pero con mucho valor".
Otras dos pasiones
Natalia confiesa que es hiperactiva, "siempre lo he sido, al menos eso es lo que mi familia me dice", y por eso, dos de sus más grandes pasiones, tienen que ver con grandes exigencias físicas.
Se trata de diferentes tipos de deportes y las danzas, actividades que realiza desde muy joven.
"No voy al gimnasio, me aburre mucho, pero sí me encanta nadar e ir explorando diferentes tipos de deportes. Ahora la lista es larga y eso me permite nunca caer en la monotonía del ejercicio, además de mantenerme en forma".
Esto lo complementa con la danza, y luego por pasar por los ritmos colombianos, los árabes y dejarse llevar por los pasos del tango, ahora Natalia está entregada al flamenco.
"Me encanta cerrar los ojos y dejarme llevar por el ritmo de la música y que mi cuerpo se exprese por sí solo", comenta Natalia Jerez.
Por ahora estará dedicada a "Los Protegidos", el deporte y las danzas, pero espera que luego de la telenovela llegue una oportunidad para volver a las tablas o debutar en el cine, dos sueños que desea cumplir con ansiedad.
