Cuando la noche caía sobre Boyacá, y el frío ya era difícil de tolerar, la noticia llegó al cuartel antioqueño: se alcanzó la docena de oros.
Este lunes, como se dice, los metales estuvieron repartidos entre Antioquia y Valle del Cauca en el primer día de competencias de la final de los trigésimos Juegos Deportivos Intercolegiados Nacionales de la categoría B.
Bien temprano, ayer, el deporte base empezó a generar buenas noticias los de verde y blanco. Paipa fue el municipio encargado de entregar los primeros títulos y en el caso de Antioquia, el que abrió la tanda fue Cristian Echeverri, en salto con pértiga. Los 3 metros y 50 centímetros fueron suficientes para que este bogotano que defiende la bandera de Antioquia, se alzara con el primer lugar.
Echeverri, quien vive y estudia en Bello, lleva más de un año en este departamento y compitió en todos los zonales regionales y departamentales antes de viajar a Boyacá, donde llegó como campeón de la modalidad.
Este joven de 17 años estuvo en el pasado Mundial de menores en Italia, donde ocupó el puesto 17 en salto con pértiga.
En el mismo deporte, pero en jabalina, el antioqueño Luis Carlos Álvarez dio otra medalla dorada al elenco paisa, que en esta disciplina sumó la lograda por Lilian Pacheco, en la misma modalidad, pero en femenino.
Luego, con la llegada de la tarde, la disciplina dorada fue el levantamiento de pesas. Ahí Antioquia cosechó seis oros, gracias a las tripletas de Kelly Johana Rosario (de Apartadó, en 44 kilos), y Francisco Mosquera (de Medellín, en 55), quienes ganaron las modalidades de envión, arranque y total.
Por último, el judo, el ciclismo y el tenis de mesa también entregaron su oro. María Camila Sánchez, del barrio Belén, ganó los 52 kilos en judo; la prueba por puntos en pista fue para Brayan Sánchez; y la faena la cerró el equipo femenino de tenis de mesa (Vanesa Salazar, Ana Arango, Natali Gómez y Alexandra Henao), que no tuvo rivales.
Pico y Placa Medellín
viernes
0 y 6
0 y 6